Carlos Calzada

Carlos Calzada


Local versus visitante

19/01/2024

Es cierto que, a pesar del nuevo año, y aunque vamos camino de la tercera jornada de 2024, todos somos conscientes de que seguimos con la asignatura pendiente de dar un paso adelante y ofrecer un mejor rendimiento en los campos a los que acudimos como visitantes.
Si no estás dentro, cuesta mucho entender que un equipo pueda cambiar tanto su rendimiento y sus sensaciones en función de si actúa como local o como visitante. Además, seguramente, el Barranco del Lobo y el CP Villarrobledo no sean el mejor escenario, pero de verdad, jugar fuera, aunque parezca lo contrario, condiciona muchos aspectos, especialmente en los deportes de equipo. El mayor ejemplo de la realidad de esta situación es cómo los equipos de fútbol ganan más partidos de locales que de visitantes.
La primera parte de este aspecto que, desde mi punto de vista, es diferencial, es ese jugador número doce que supone la afición. A estos niveles, muchos jugadores aún no tienen todas ni las mejores estrategias para gestionar los niveles de estrés que genera jugar ante un millar de personas o en un ambiente hostil, algo que modifica sí o sí el rendimiento, te animen o vayan en tu contra.
Esta circunstancia, la de la afición, también influye sobre el colectivo arbitral. Está demostrado que la cantidad de acciones señaladas por los árbitros varían en función de si hay o no afición.
Por otro lado, se dan otros aspectos importantísimos, como las dimensiones del terreno de juego, la superficie y su estado, la elección del tipo de taco... Aquí la clave es la capacidad de adaptación que tenga el jugador a todas estas circunstancias, ya que, cuanto más rápida sea, menos será la desventaja.
Incluso, el horario de juego, ese que tanto preocupa cuando juega el CD Toledo en el Salto del Caballo, condiciona al jugador, y lo mejor sería conseguir un patrón que permita acompasar los ritmos internos de cada uno de ellos en busca del mejor rendimiento.
O una gran infinidad de aspectos, como los desplazamientos en autobús: a más tiempo, más incomodidad, el tiempo de concentración previo, las horas de descanso, la dieta, el tiempo de ingesta antes de la competición… Todo esto condiciona todo lo que pasa en torno al partido de competición, y desde fuera debemos tratar de controlarlo y estabilizarlo para preparar al jugador para rendir igual fuera que dentro de casa.