Puso de moda este lema el Julio Anguita, líder comunista con unos ideales completamente diferentes y divergentes del chupi-comunismo actual.
Pero, en realidad, no sólo él lo reivindicaba. Adolfo Suárez, en sus tiempos post-traición, cuando fundó el CDS, también defendió el 'programa, programa, programa'. Incluso Aznar, cuando ganó a González, consiguió gobernar por las características de su programa. Porque cumplió su programa, ganó por mayoría absoluta en la siguiente legislatura.
Estamos, ya en el 2023, hartos de mentiras, de incumplimientos y de insultos personales y a la inteligencia que, día a día, se acometen desde el gobierno de Page, y vemos como no cumple ni tiene programa. Todo lo basa en propaganda. Se nutre de vanagloria y autocomplacencia. Arrogancia y poca empatía con las necesidades de la gente.
Castilla-La Mancha necesita un programa realista, sin utopías, realizable y de crecimiento, con personas que vivan por y para conseguir que la región avance. Con propuestas nacidas y recogidas directamente de las necesidades de los ciudadanos.
Lo escrito, escrito está, y el empeño de la palabra es muy importante para la gente porque se plasman no sólo las necesidades, sino las soluciones veraces, realizables y, fundamental, útiles.
Este tipo de cuestionamientos viene dados por los que cumplen con su palabra y los que han demostrado, muchas veces, que no tienen ni palabra, ni principios. Por los que les da igual 8 que 80 y los que se emplean a fondo por hacer aquello que beneficie al conjunto de la sociedad.
El programa electoral es un contrato con la ciudadanía, un empeño de la palabra, un compromiso de realizar aquello que se necesita para mejorar la calidad de vida. Castilla-La Mancha necesita el cambio de gobierno que permita una región que tenga un verdadero contrato con la población, con sus municipios y nuestra forma de ser y de vivir.
Programa, programa y más programa para mejorar la fiscalidad, incentivar a los autónomos, ayudar a las familias, incrementar las oportunidades laborales, mejorar la formación, promocionar nuestras costumbres, cuidar nuestro patrimonio, vender nuestros productos. Paco Núñez ha presentado un equipo y llevará un programa que, anuncia, es un contrato con el conjunto de los castellano-manchegos y va empeñada su palabra, y la de muchos, en que ese contrato se lleve a cabo ya.