Ángel Monterrubio

Tente Nublao

Ángel Monterrubio


El arco de las quintas de Valdecaballeros

19/04/2023

Valdecaballeros es villa de la comarca de La Jara, ultimo pueblo hacia el sur de la Antigua Tierra de Talavera que, con la división territorial provincial de Javier de Burgos en 1833, quedó incorporado a la provincia de Badajoz. Como santo y seña de aquella antigua pertenencia el escudo de Valdecaballeros conserva en uno de sus cuarteles la torre albarrana y los toros que identifican el escudo de Talavera.
El Domingo de Resurrección los quintos han venido celebrando una antigua tradición que, cristianizada, entronca con los ritos de paso y las fiestas de primavera en las que el árbol y la vegetación aparecen como símbolos de la vida. El sábado los quintos de ese año ponen dos enormes pinos, que previamente han cortado y trasladado del monte, uno en cada lado de una calle del pueblo y los enlazan y engalanan durante todo el día con un enorme y vistoso arco floral, bajo el cual a la medianoche se producirá el encuentro entre Cristo Resucitado y la Virgen. Hasta ese momento, los quintos vigilan que absolutamente nadie pase bajo él. Una de las peculiaridades del arco es que cada quinto coloca una bandera bordada con mucho esmero en la que aparece su nombre y apellidos o iniciales, año del reemplazo al que pertenece y otros motivos florares, geométricos y religiosos; bandera que, tradicionalmente, bordaba su novia, en caso de tenerla, o su madre.
La buena noticia es que este año, por primera vez, las mujeres han participado en esta tradición como protagonistas directas. Lucía Arenas López, joven de Valdecaballeros, estudiante de Educación Social en la Facultad de Ciencias Sociales de Talavera, pensó que ya era hora de que las quintas del pueblo también fueran personajes centrales del antiguo rito. Su empeño en romper barreras ha tenido éxito y una acogida favorable por parte de toda la localidad. Siete chicos y siete chicas, los quintos y quintas de este año, han traído los pinos del monte, han engalanado el arco y cada uno ha puesto su bandera correspondiente. Lucía ha abierto la puerta. Muchas mujeres rurales, como Lucía, rescatan, mantienen o potencian viejas tradiciones que forman parte de nuestro acervo cultural y que no se deben perder. El futuro del medio rural, si lo tiene, pasa, sin duda, por la mujer.