La Alameda se convierte dos veces al año en lugar de encuentro para talaveranos, vecinos de la comarca y de otras provincias limítrofes, que se acercan hasta la ciudad para compartir con sus habitantes los tradicionales festejos de San Isidro, en mayo, y de San Mateo, como este caso, en septiembre. Para recibir a todos ellos, casetas, puestos y atracciones ocupan este verde rincón de la ciudad con el objeto de cubrir la demanda y llenar los ratos de ocio de los miles de visitantes que cada día se acercan hasta el recinto ferial.

Uno de los puntos más concurridos en cada edición de las ferias de Talavera es la plaza de la Comarca, donde este San Mateo 2023 habrá un total de quince casetas a disposición del público. Cada una de ellas es representativa de un municipio diferente, como es el caso esta vez de Espinoso del Rey, Lagartera, El Real de San Vicente, Mejorada ,Pepino, Montesclaros, Cervera, Segurilla, Cazalegas, Herreruela, Navamorcuende, Talavera la Nueva, Velada, Navalcán y Gamonal.

Es un ejemplo más de la sintonía entre Talavera y sus municipios vecinos, algo que se evidencia de manera especial en la festividad de las Mondas, y que siempre se pone de relieve por parte del Ayuntamiento talaverano, cabecera de una gran comarca con la que crece de la mano.

Todas las casetas a las que dan nombre configuran y delimitan uno de los espacios del ferial que más afluencia de público registra y donde arrancan cada San Isidro y San Mateo desde el escenario donde se pregonan las fiestas y tiene lugar el concierto inaugural de las ferias talaveranas.

Punto de encuentro. Rodeada de sus municipios, Talavera celebra estos días de convivencia en torno a un recinto al que se suman otros espacios próximos como el paseo de la Alameda, que cuenta este San Mateo con otras 17 casetas de la mano de asociaciones, colectivos, partidos políticos y empresas, entre otros. 

En el caso de las casetas de la plaza de la Comarca, además de bebida, se podrán degustar a lo largo de estos días de ferias desde los populares pinchos morunos hasta raciones y bocadillos de una amplia selección de productos gastronómicos. Por ello puede que sea una de las zonas más visitadas del ferial de la Alameda a la hora de las cañas y de reponer fuerzas tras disfrutar de las atracciones y los conciertos.

De hecho, son muchos los visitantes que aprovechan las mesas que las diferentes casetas instalan en el exterior de sus carpas para disfrutar cómodamente de los conciertos programados en el escenario de la plaza de la Comarca mientras tapean o toman algo durante las Ferias.