El movimiento obrero, origen de la conquista de derechos

Leticia G. Colao
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David Morales, director de UNED Talavera, analiza en su tesis doctoral el fenómeno social y político que unió a los trabajadores en defensa de unas mejores condiciones

El movimiento obrero, origen de la conquista de derechos - Foto: L.T.

Los orígenes del movimiento obrero en la provincia, la cuestión social y los primeros sindicatos o unión de trabajadores para defender y mejorar sus derechos laborales son  analizados de forma detallada en la tesis doctoral del profesor y director del Centro Asociado de la UNED de Talavera, David Morales, por la que ha obtenido la calificación Sobresaliente Cum Laude tras una investigación de más de cinco años.

'El movimiento obrero en la provincia de Toledo (1868-1930)' se expone durante 560 páginas que han sido defendidas recientemente en la Facultad de Greografía e Historia de la UNED, en Madrid.  Su autor, máximo responsable del centro en Talavera desde el pasado septiembre, recoge los orígenes y características de la cuestión social, término con el que se conocía en el siglo XIX a las inquietudes generadas por los problemas y escasos derechos de la clase trabajadora.

Morales ha centrado su investigación en el ámbito provincial, que carecía de este tipo de estudios en su conjunto, con especial importancia de los núcleos más poblados, Talavera y Toledo, aunque también recoge el de otros municipios donde ha obtenido referencias. Para ello, se ha nutrido de las fuentes de diferentes archivos locales, provinciales y nacionales, además de ayuntamientos y de diferente documentación y bibliografía de diversos historiadores.

La evolución del movimiento obrero desde finales del siglo XIX hasta el primer tercio del XX se apoya en una serie de cambios estructurales socio-económicos en la provincia, al compás del resto del país. La llegada del liberalismo, la disolución de los gremios y cómo los trabajadores van adquiriendo conciencia para ir asociándose en pro de sus derechos marcan el camino en la consecución de los actuales derechos laborales, indica Morales, que centra su tesis en el ámbito del trabajador rural.  

Son los mismos obreros los que toman conciencia de que pese a la nueva situación económica, con el desarrollo del liberalismo económico y político, siguen desprotegidos porque esta nueva realidad no va acorde al desarrollo de una legislación que les ampare. «Son ellos, los trabajadores quienes tienen que adquirir esa conciencia de grupo, para defender sus propios derechos no solo en un ámbito general del país sino en empresas, trabajadores del campo que tienden a asociarse por verse desprotegidos en cuanto al descanso dominical, una jornada laboral acorde a sus trabajos, higiene en el trabajo, previsión social, por si caes enfermo o llegas a una edad en la que no puedes trabajar, tener un sustento social...»

Conquista derechos. Este fenómeno social y político conquista derechos gracias a la legislación que aprueba poco a poco el Estado pero, a la vez, «provoca conflictos entre un grupo que tiende a diferenciarse, ya empezamos a hablar de grupos sociales, de clases, y se va generando conciencia y lucha de clases entre aquellos que no quieren que los trabajadores defiendan sus derechos y los propios trabajadores que lo necesitan».

A este hecho se suman otros condicionantes fundamentales en esta lucha, entre ellas la llegada de ideologías puramente obreras. Parte de «este conflicto social tendrá su culmen en julio del 36, con el estallido de la Guerra Civil», explica Morales.

El movimiento obrero, que se inicia en las protestas, el asociacionismo, la formación de los primeros sindicatos y federaciones, y la llegada también a la actividad política, entrando en concejalías y alcaldías, fue la semilla de avances tan importantes como la Ley del Descanso Dominical, la jornada laboral de 8 horas de 1919, «algo que ahora nos parece normal pero antes era una aberración», la aparición del primer Ministerio de Trabajo o el instituto de Previsión Social, previo a la actual Seguridad Social.

La tesis doctoral de David Morales y su máxima calificación, celebrada con cerámica de Talavera, se publicará en un libro que completará la historia de la provincia.