Un viejo taray de grandes dimensiones y próximo a la ribera del Tajo, dentro del parque de Safont y en el entorno de la central hidroeléctrica, ha aparecido en la mañana del sábado talado por múltiples puntos. Los cortes han colapsado la imponente estructura del árbol centenario. «Si lo equiparamos con el patrimonio monumental es como si hubieran tirado la Puerta del Sol», explica Enrique García, académico numerario de la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo. «Se trata de uno de los cinco grandes árboles que tiene Toledo», proclama el también vicedecano del Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Forestales. El taray talado era un «un árbol natural regalado por la naturaleza», un ejemplar que había terminado integrándose en la trama urbana por la propia expansión de la capital regional en las últimas décadas. El descomunal ejemplar tenía dos ramas principales, dos troncos que en el año 2010 tenían 3 metros y 2,50 metros de perimetro respectivamente. Los cortes sufridos no le impedirán rebrotar, pero su condición característica, cincelada por el paso del tiempo, se antoja irrecuperable. «Hemos dejado las raíces, pero nos hemos cargado el árbol», lamenta García.
La asociación medioambiental ARBA Toledo ha lamentado que con esta poda se haya «talado casi a pie de tierra un taray centenario considerado como árbol monumental». El árbol no estaba dañado y había resistido el paso reciente de la nieve, las heladas y el fuerte viento que sopló en el día de ayer. Desde este colectivo han tachado el hecho como un grave «atentado ecológico contra el patrimonio natural de la ciudad» y han exigido al Ayuntamiento que depure responsabilidad y explique qué ha ocurrido.
Por su parte, la concejala de Parques y Jardines, Marta Medina, ha avanzado que el Consistorio, a través de la Policía Local, está investigando la tala del ejemplar en el parque de Safont «que se ha llevado a cabo por terceros sin autorización ni conocimiento del Ayuntamiento», según ha indicado en una nota de prensa.