A los discípulos de Aristóteles se les conocía como peripatéticos. Su nombre extrae su origen de una palabra griega que significa "paseo", pues el maestro enseñaba al mismo tiempo que se paseaba con sus discípulos. Empleando un juego de palabras, el presidente del Grupo Socialista en las Cortes, Fernando Mora, consideró que el presidente regional del PP y candidato a la Junta de Comunidades, Paco Núñez, "no es peripatético, pues no aprende nada, sino patético", aunque precisó que no se lo decía como insulto, sino más bien por los "bulos" que emplea cuando habla de la gestión del presidente Page.
En rueda de prensa, Mora consideró que Núñez no tiene proyecto para Castilla-La Mancha, frente a los cuatro años de "estabilidad" que ha logrado Page, lo que se traduce "en generación de riqueza, inversiones y empleo".
Dicho esto, lamentó que ahora el PP se acuerde del agua para la región, aunque censuró que el objetivo de la oposición sea recuperar el Plan Hidrológico Nacional (PHN) que "significa que el Tajo se trasvase".
Añadió que Núñez "solo tiene ocurrencias y solo busca ser presidente a toda costa, lanzando bulos y mentiras, pero no lo hace él, manda a terceros". "Su problema es que no convence porque ni él mismo cree en sí mismo, por no decir sus correligionarios", apostilló el dirigente socialista.
Por último, criticó que Núñez acuda a Puertollano (Ciudad Real) acompañado del expresidente del Gobierno, Mariano Rajoy, "un señor que aprobó la mayor subida de impuestos nunca vista en este país, algo que a la gente se le olvida", dijo. "Sería mejor que cogiera otro bastón porque este está roto", aconsejó a Núñez.
NO QUEREMOS UN GOBIERNO DE RADICALES. Respecto a la visita este miércoles a Toledo del vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, de Vox, Mora confesó no sentir "miedo", pero sí que fue para "echarse las manos a la cabeza". Aseguró que los ciudadanos no quieren un gobierno de radicales, porque "el problema no es solamente Vox, sino también el Partido Popular", al que considera un partido totalmente "radicalizado" en Castilla-La Mancha.
"Lo que no queremos para Castilla-La Mancha es un gobierno de radicales", comentó el presidente de los socialistas en las Cortes, que añadió que lo que la comunidad autónoma necesita son otros cuatros años de "estabilidad y moderación" de la mano de García-Page.