El CD Torrijos agranda su agujero (0-1)

J. M. Loeches
-

Con un gol de Dieguito, el Calvo Sotelo Puertollano se llevó los tres puntos del San Francisco y encendió las alarmas en el cuadro toledano, que está más cerca del descenso

El CD Torrijos agranda su agujero (0-1)

No hay manera de corregir la tendencia. El CD Torrijos no es capaz de erguirse de nuevo para mirar para arriba y, después de caer contra el Calvo Sotelo Puertollano en el San Francisco, no queda más remedio que mirar hacia abajo. No fue una buena tarde. El rival peleó más por adelantarse en el marcador, y, cuando lo hizo, supo defender la renta como un tesoro. Los rojiblancos tampoco tuvieron argumentos, a pesar de mostrar el ímpetu habitual.

No se habían cumplido ni siete minutos cuando Ayoub estuvo a punto de amargar la tarde a su exequipo. Remató de cabeza un saque de esquina al que respondió Berlana con buenos reflejos. El cuadro rojiblanco tenía la intención de dominar, con el balón en los pies, pero el conjunto minero estaba poniendo las ocasiones, con salidas rápidas y acciones a balón parado.

Pero los de Esteban Becker marcaron territorio con una buena llegada, después de salir con la pelota jugada, que finalizó Pacheco con un lanzamiento desviado. El encuentro estaba precioso, porque, instantes después, Ricardo dispuso de un remate de cabeza sin oposición, en un córner, que no cogió portería.

El CD Torrijos agranda su agujero (0-1)El CD Torrijos agranda su agujero (0-1)El Calvo Sotelo Puertollano tendía a acelerar a partir de los tres cuartos. Sin tener el control, fue el equipo de Fernando Lominchar el que no dudó en probar a Berlana. En el minuto 24, Ayoub lo volvió a intentar con un remate que acabó interceptando la zaga.

Se estaba jugando a lo que querían los mineros. Con todo a favor, Iván Henares remató alto dentro del área después de un centro desde la izquierda. El CD Torrijos salvó de nuevo de verse por detrás en el marcador, aunque lo peor es que la imagen no era la adecuada.

Se recuperó un poco, pero no fue suficiente para parar atar en corto a los contrarios. A cada acometida, dieron la sensación de peligro. De hecho, en una salida que parecía haber ganado Berlana, el portero se acabó haciendo un lío y generó un malestar que al final no tuvo consecuencias. Pero no paró el Calvo Sotelo de pretender el gol hasta el final de la primera parte. Fue un alivio para el Torrijos recuperar el resuello.

Ayoub volvió del descanso haciendo de las suyas. No había indicios de que puediera cambiar el panorama. De hecho, Adama disfrutó de la mejor oportunidad del encuentro, con un pase en profundidad de Oliva que dejó solo al centrocampista. Berlana le quitó la posibilidad rematar, pero Ayoub, que estaba por ahí, recogió el balón y la estrelló en el palo. Se salvó otra vez el CD Torrijos. En apenas cinco minutos del segundo periodo.

Se pidió un posible penalti por falta en el área, muy protestado desde el banquillo. De hecho, le costó la expulsión al segundo entrenador, Rafa Guerrero. Pero, inmediatamente, el Calvo Sotelo Puertollano recuperó el ritmo de llegadas. Estaba rondando el gol. Y lo logró. En un contragolpe mal defendido, Dani Oliva lanzó a la carrera a su compañero, que recibió la pelota, corrió como una liebre hacia Berlana, y, cuando Acuña le iba a entrar, se sacó un latigazo con la izquierda que entró por toda la escuadra.

Ahí quiso ponerla Bamba unos minutos después, tras un barullo en el área. La verdad es que el CD Torrijos pasó a tener el control desde que recibió el gol. Le entraron las prisas por marcar. Becker modificó dos de sus piezas, para dejar a Ambo como punta de referencia. Abase de empuje, el CD Torrijos consiguió alojar la pelota en la red contraria, pero Cabañas estaba en fuera de juego. Quedaban todavía quince minutos por jugarse.

La impotencia se apoderó del cuadro toledano. Con múltiples interrupciones por lesiones en el Puertollano, se fue consumiendo poco a poco lo que restaba. Encima, a cuatro del final, Cabañas vio la segunda amarilla en una jugada bastante dudosa. Llevaba poco en el campo, pero se tuvo que ir antes de tiempo. Se desencadenó un carrusel de tarjetas amarillas más, y los tres últimos cambios: Max, Pepe y el juvenil Aarón.

Era lo que tenía Becker para disparar. No le dio, a pesar de los ocho minutos de alargue. Y el Torrijos que se mantiene atascado desde hace ya unas cuantas semanas, cada día más cerca de la zona de descenso.