Eran las cinco y media de la tarde del pasado martes 23, cuando se originó un incendio en transformador de luz de la urbanización El Cavero de Olías del Rey. Las causas, la «sobretensión» existente debido a que los cables no estaban regulados, al existir un enganche ilegal de las familias que viven en el edificio de la Tesorería de la Seguridad Social, ocupado desde hace años por varias familias. Éstas, se encuentran sin luz desde ese día.

El alcalde de este municipio toledano, José Manuel Trigo, explica que por estas circunstancias el transformador salió ardiendo, siendo precisa la intervención de los bomberos, provocando un apagón en la zona de El Cavero, otras urbanizaciones del Sur de Olías del Rey así como parte del casco urbano. La luz no se repuso hasta las doce de la noche de ese mismo día, aunque hubo problemas para restablecer el alumbrado púbico en la urbanización El Cavero, la cual se repuso este lunes.

Sin embargo, explica Trigo, las familias del edificio de la Tesorería de la Seguridad Social «siguen sin enganche».

De esta forma, el Ayuntamiento ha conseguido reunir tanto a una representación de las mismas como a miembros de la compañía eléctrica  para que así se «regularice» la situación en términos de consumo de energía. Y es que los enganches ilegales en los transformadores provocan «una serie de problemas» y «estamos expuestos a que mañana haya otro incendio», que en esta ocasión se produjo a escasos metros de un chalet de esta urbanización.

Se trata, de esta manera, que las personas que viven de forma ilegal ocupando esta zona puedan contar con un contador propio para que abonen así el consumo que realizan y eviten que se produzcan situaciones como la vivida la semana pasada.

Ayudas. Ante la situación, el Ayuntamiento de Olías se ha ofrecido, en la persona de su alcalde, a ayudar a una serie de familias (dos o tres) que cuentan entre sus miembros con personas diabéticas, por lo cual necesitan la refrigeración de sus medicamentos. Al no tener luz, los frigoríficos no funcionan y Trigo ha dado el aviso de que se pongan en contacto con él para ofrecerle los servicios que necesiten.

Actualmente, en este poblado de El Cavero hay cuarenta y dos familias. En relación a su desalojo, ya que se encuentran en terrenos de la Tesorería de la Seguridad Social, todavía están abiertos los trámites con esta institución para intentar solucionar una problemática que viene de hace varias décadas. Mientras tanto, el Ayuntamiento ya procedió hace meses a la declaración formal de ruina del inmueble habitado.

Hay que recordar que hace unos años hubo incendio que dejó las dependencias en peor estado del que estaban, pero el susto no hizo que los gitanos allí asentados se marcharan del lugar, ya que tampoco tienen otro sitio donde ir. Entonces no hubo que lamentar daños personales, pero el alcalde teme que el edificio termine cayéndose en parte, lo puede dar lugar a situaciones irremediables.