Las autoridades ucranianas elevan ya a 136 el número de niños muertos como resultado de la invasión rusa, iniciada el pasado 24 de febrero, mientras que otros 199 menores habrían resultado heridos.

La mayor parte de las víctimas, sean mortales o heridos, se ha producido en Kiev, según los datos de la oficina del Fiscal General de Ucrania.

Dicho departamento cifra asimismo en 570 el número de edificios escolares o educativos atacados por las tropas rusas, de los cuales 73 han resultado totalmente destruidos.

El Estado Mayor de las fuerzas ucranianas afirmaron asimismo que desde el inicio de la invasión las tropas rusas han perdido 16.400 efectivos, sean soldados muertos, heridos o prisioneros.

El alto mando militar ruso informó ayer, al dar por terminada la primera fase de la operación militar en Ucrania para concentrarse en el Donbás, de que el número de soldados de sus filas muertos era de 1.351, mientras que el de heridos se sitúa en 3.825.

La nueva cifra es casi tres veces mayor a la que ofreció el Ministerio de Defensa ruso el pasado 2 de marzo, que ascendía a 498 caídos en combate.