Cultural Leonesa: Cristian; Muguruza, Trigueros, Amelibia, Julen Castañeda; Jesús Álvarez, Tarsi, Alberto Solís (Néstor, min. 78); Percan, Obolskii (Claudio, min. 92) y Alarcón (Kevin Presa, min. 78).
Talavera: Rabanillo; Perdi (Moha, min. 81), Morante, Neyder, Dani Ramos; Zanelli (Sangare, min. 59), Reguera (Clovis, min. 81), Sito Riera (Salanovic, min. 69); Álvaro Juan, Buenacasa y Edu (Loukou, min. 69).
Árbitro: Fuente Martín (Comité cántabro). Sin amonestaciones.
Goles: 1-0 Obolskii (min. 48). 2-0 Alberto Solís (min. 60). 2-1 Cristian, en propia puerta (min. 75). 3-1 Muguruza (min. 93).
Campo: Reino de León. 4.111 espectadores.
El Talavera cerró por fin su temporada de pesadilla en el Reino de León. Lo hizo con una nueva derrota, la 21 del curso, frente a la Cultural Leonesa (3-1). Los errores condicionaron al cuadro cerámico, al que también se le acumularon los problemas con las lesiones. El autogol de Cristian abrió una puerta para la esperanza de sacar algo positivo tras recibir dos mazazos en el primer cuarto de hora del segundo periodo, pero Muguruza, en el añadido, se encargó de certificar el triunfo local. Son solo 11 puntos fuera de casa –tercera peor marca de la categoría– los que ha podido cosechar el equipo, ya descendido desde su derrota en la antepenúltima jornada, en una campaña que finalizó como colista del grupo 1 de la Primera RFEF.
Tanto el cuadro leonés como el talaverano salieron sin tapujos a por el partido, con convencimiento absoluto de buscar la portería rival. Perdi fue el más activo por el costado derecho, mientras que a la Cultural Leonesa le costaba ser vertical. Poco a poco, el equipo leonés empezó a desplegarse con facilidad al contraataque, y en esas llegó una doble ocasión protagonizada por Muguruza. La primera la frustró Dani Ramos cuando éste se marchaba sólo hacia la meta, y la segunda fue en un remate de testa de Obolskii que no tuvo suficiente fuerza para significar algo más.
En otra internada por la derecha, Alberto Solís pudo conseguir el primer tanto al recibir el pase desde la línea de fondo, pero su disparo con el interior lo desbarató un atentísimo Rabanillo, que envió la pelota a córner. Desde este punto en adelante, el Talavera perdió los mandos del duelo en favor del cuadro leonés, que cada vez se encontraba más cómodo en campo rival. Solís, a pocos minutos del descanso, tuvo la penúltima opción de la mitad en un error de salida de balón por parte del conjunto dirigido por Pedro Díaz, pero su golpeo mordido desde la media luna se marchó fuera.
La escuadra talaverana combatió el dominio local en los últimos compases de la primera parte, e incluso llegó a tener un tiro prometedor en las botas de Buenacasa, que obligó a Cristian a emplearse en dos tiempos para detenerlo.
El gol tonto de la jornada abrió el marcador en favor de la Cultural Leonesa a los dos minutos de reanudarse el juego. Obolskii intentó enganchar un centro raso desde la derecha, pero tan solo pudo rozar el esférico. En un intento defectuoso de despeje, Perdi acabó impactando la pelota de nuevo en el cuerpo del ariete ruso, y el rechace a ese envió superó la línea de gol que defendía Rabanillo.
De ahí en adelante, los jugadores de Eduardo Docampo asumieron el control total del encuentro y no tardaron en aumentar diferencias. Jesús Álvarez se inventó un gran pase entre líneas que leyó a la perfección Alberto Solís, quien controló y armó el chut dentro del área, con la mala suerte para el Talavera de que salió repelido en un defensa y superó por altura a un vencido Rabanillo. Con los jugadores de Pedro Díaz ya totalmente vencidos, Rabanillo sacó dos ocasiones más con los pies antes de que, en un error todavía más inédito que el del 1-0, a Cristian se le escapase el control en una cesión atrás de Amelibia, y el balón acabase colándose en su propia portería.
Este tanto surrealista redujo diferencias de cara a los últimos diez minutos, en los que pasaría poco sobre el césped. El Talavera asumió la posesión del balón como llevaba haciendo durante todo el encuentro, pero sin tener capacidad suficiente para combinar más allá de la divisoria entre los dos campos. La Cultural Leonesa robaba con una facilidad pasmosa y conseguía ponerse cerca del área de castigo en apenas dos o tres pases rápidos. En el último minuto de partido, Muguruza puso el golpe de gracia al cuadro talaverano con un disparo milimétrico en una falta frontal al borde de la media luna. Con ese imponente gol a balón parado, el equipo leonés puso punto y final a la temporada del cuadro talaverano, que cerró su calvario con una derrota más en el casillero. Por su parte, el conjunto culturalista certificó una permanencia que ya tenía casi en la mano.