Lucha biológica en el castañar de Toledo

J.Moreno
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Los especialistas, encabezados por la Junta, han liberado en mayo un depredador natural de la avispilla del castaño, un parásito extendido por la Sierra de San Vicente

Lucha biológica en el castañar de Toledo

Fidel Esteban se incorporará en breve como nuevo concejal de Hinojosa de San Vicente. Este ingeniero forestal madrileño trabaja en la Brigada de Refuerzo de Incendios Forestales (BRIF) de La Iglesuela del Tiétar y se mudó a vivir a la Sierra de San Vicente. Precisamente, se aposentó en Hinojosa, uno de los cuatro municipios que comprende el único castañar de la provincia.

Este joven de 29 años recorre diariamente los castaños plantados hace medio siglo. Los de Hinojosa de San Vicente se extienden por 30 hectáreas en una mezcla entre terrenos privados y patrimoniales. Fidel calcula por encima que habrá unos 2.000 ejemplares en la localidad, como parte de un castañar extendido principalmente por El Real de San Vicente. Castillo de Bayuela y Navamorcuende albergan también esta especie sin gular en la provincia.

Fidel, un entomólogo aficionado, se personó el día 9 en el castañar acompañado por personal de la Junta de Comunidades y del Ayuntamiento, así como representantes de los Agentes Medioambientales. Los especialistas iniciaban un plan de ejecución y seguimiento para combatir la avispilla del castaño, un parásito que debilita al árbol, sobre todo a las hojas. Se trata de un insecto que se reproduce por partenogénesis y no necesita un macho. La multiplicación es aceleradísima.

Lucha biológica en el castañar de ToledoLucha biológica en el castañar de ToledoFidel explica a este diario que la avispilla se ha extendido levemente por el término de Hinojosa de San Vicente; apenas por cinco de las 30 hectáreas y sólo ha afectado a parte de los ejemplares de la zona señalada. «Son recuperables», confía.

Para esa recuperación, los especialistas han azuzado una lucha biológica con la suelta de un depredador natural desde el día 9. La Junta de Comunidades avaló la utilización del llamado 'Torymus sinensis' para atajar el avance de la avispilla del castaño. Parasita al parasitador. El Gobierno regional ha adquirido estos insectos a una empresa autorizada de la provincia de Almería.

La avispilla pincha la rama y deja el huevo, que genera una protuberancia dañina para el árbol. La curiosidad de Fidel ha olfateado una extrañeza en la expansión de la avispilla del castaño. Apenas ha avanzado por las 30 hectáreas de Hinojosa de San Vicente. Por eso, se propone estudiar la posible presencia de un elemento autóctono que haya combatido naturalmente a este insecto.

La lucha biológica entre la avispilla del castaño y el 'Torymus sinensis' es desigual. La avispilla se reproduce con una mayor facilidad y cantidad de ejemplares, por lo que el efecto de la suelta de estos últimos insectos se advertirá a largo plazo.

La presencia de este insecto es una de las afecciones más comunes de estos ejemplares, pero abunda también la tinta, que no da problemas eso sí este año en Hinojosa, un pueblo que ingresa sólo 900 euros al año por las cinco hectáreas de castañar.

Fidel espera su incorporación al gobierno local con una visita diaria a los castaños y evalúa los efectos de esta lucha biológica a favor del patrimonio natural del pueblo.