A pesar de la falta de calor, ayer abrían las piscinas municipales de Toledo con casi total normalidad, una normalidad que sería completa si, como otros años, las instalaciones de Santa Bárbara hubieran contado con su bar. Los vecinos del barrio ferroviario han comenzado a reclamar un servicio con el que sí cuentan los demás barrios y el Ayuntamiento ha adelantado su intención de solucionar el problema en las próximas fechas y garantiza que se dará servicio de bar a los usuarios de esta piscina.

El concejal de Deportes en funciones, Pablo García, explica que  los actuales adjudicatarios, que firmaron por un total de diez años, se han echado para atrás, porque no pueden hacer frente a la obra y las horas de servicio que marcaba la licitación. El Ayuntamiento les ha requerido una documentación, que todavía no han entregado, para firmar de mutuo acuerdo la rescisión del contrato, que ahora se está tramitando a nivel jurídico.

La nueva concesionaria cogía en 2022 los bares de la piscina, el pabellón y el campo de fútbol de Santa Bárbara por un precio que muchos vieron desorbitado, 8.000 euros al año. Además, tenía que hacer el nuevo bar por su cuenta, dado que el anterior lo destrozó la Dana. Desde entonces, apuntan los usuarios, parece que el bar no ha funcionado como quizás los concesionarios esperaban. También denuncian que no se ha construido el nuevo quiosco. La resolución del contrato afectará a los tres bares, el del pabellón, campo de fútbol y piscina.

A partir de ahí, García se compromete a buscar una solución para los usuarios de la piscina de Santa Bárbara. El actual contrato tiene que estar resuelto en cinco o diez días. Después el Ayuntamiento abrirá un plazo para los interesados a quedarse el bar por esta temporada, para a partir de la próxima sacar una nueva licitación. «Nosotros lo que tenemos que hacer es dar servicio a la piscina este verano y que nadie dude que lo va a tener, si no es esta semana, puede ser la que viene», apunta el edil.

Ya hay personas interesadas en el lote de bares que se han puesto en contacto con el Ayuntamiento. Este les pedirá una oferta primero a los que participaron en el anterior concurso, y después al resto de interesados. El Patronato tendrá que elegir el método de concurso, que probablemente sea a mejor oferta. La solución, apunta García, tiene que estar cerrada antes del relevo municipal.

Recogida de firmas. El inicio de la temporada de piscina de verano sin bar ha indignado a los usuarios de Santa Bárbara, que con el temor de que la situación se pueda extender durante todo el verano, han comenzado a quejarse en redes y ante el Ayuntamiento. Algunos plantean una concentración a las puertas de las instalaciones. Por su parte, Yolanda Martínez ha escrito al Buzón del Ciudadano Municipal y a la página del Patronato Deportivo, y ha iniciado una recogida de firmas.

Martínez fue la persona que también se quejó al Ayuntamiento por la falta de abonos en año después de la pandemia, y que se priorizara a quienes lo tuvieran en 2020. Ahora no entiende que a estas alturas de año no se hayan licitado todos los contratos. Recuerda que las demás piscinas de verano sí cuentan con su bar. En Santa Bárbara no es así, y el precio es el mismo. De nuevo, critica como otros usuarios, este es el barrio más perjudicado, «queremos que nos traten por igual, pagamos los mismos servicios, queremos los mismos servicios».

Se lamenta que un barrio como Santa Bárbara, con ocho mil vecinos, no vaya a contar con unas instalaciones a las que incluso llegaban usuarios de otras zonas de la ciudad.