¿Cómo suenan los cuadros del Greco? El conjunto musical Nereydas, dirigido por Javier Ulises Illán, la Editorial Cuarto Centenario y el sello discográfico CMY Baroque se han unido para dar respuesta a una pregunta que el propio Manuel de Falla llegó a formularse en el Corpus Christi de Granada en 1922. Quince años después, Alfred Hartmann y Maurice Legèndre propondrían resonancias musicales a la obra del pintor en clave de cante jondo, en línea con la sensibilidad del postromanticismo francés.
Angélico Greco, el libro-disco que ayer fue presentado en el Museo de Santa Cruz en presencia del alcalde de Toledo y del director general de Cultura de Castilla-La Mancha, es un recorrido por la época del Greco y su «aún escasamente conocido mundo sonoro» a través de los instrumentos musicales que aparecen representados en sus pinturas, una cuidada selección de músicas de los mejores compositores de la época (desde Tomás Luis de Victoria y Alonso Lobo hasta Francisco Guerrero), realizada en lugares históricos de la ciudad, y un apartado literario en donde se propone un estudio del pintor «en el que se relacionan muy especialmente la pintura y la música».
La grabación de Angélico Greco ha contado con músicos especializados en la interpretación historicista de la música. Tanto los cantantes como los instrumentistas pertenecen a una generación emergente de músicos españoles, con dilatada experiencia y carreras internacionales. El conjunto de voces está formado por las sopranos María Eugenia Boix, Eva Juárez y Sandra Redondo; el alto Felipe Nieto y los tenores Gerardo López y Diego Blázquez; el barítono Elier Muñoz y el bajo José Antonio Carril. La parte instrumental ha estado formada por Manuel Minguillón (laúd y vihuela), Juan Portilla (flautas), Laura Salinas (viola de gamba y violonchelo), Silvia Jiménez (violone), Sara Águeda (arpa de dos órdenes), Yago Mahúgo (cembalino y órgano), Juan José Montero (órgano de la Catedral de Toledo y campanas), Daniel Garay (percusión) y Daniel Pinteño (violín).
El ensemble Nereydas ha sido dirigido por el toledano Javier Ulises Illán, intérprete, a su vez, de violín y carrillón en este proyecto.Se trata de su segunda investigación musical publicada por Cuarto Centenario tras Violines en la Selva, publicado en 2010.