Una nueva cita de Cañas por España, el evento con el que Vox trata de aproximarse al público más joven, acercó a Toledo en la tarde del  miércoles al vicepresidente de Castilla y León, Juan García-Gallardo. La presencia del cargo institucional más relevante que tiene el partido fue secundada por decenas de simpatizantes. Junto al número dos castellano comparecieron la cabeza de lista de Vox al Ayuntamiento de Toledo, Inés Cañizares, y el candidato a la presidencia de la Junta de Castilla-La Mancha, David Moreno. Los tres hicieron un llamamiento a los votantes de menor edad y se erigieron en la alternativa para blindar el crecimiento económico y el potencial desarrollo de proyectos vitales.

Según explicó Inés Cañizares, la juventud vive en un momento de «incertidumbre» para el que los partidos tradicionales no ofrecen soluciones. La candidata criticó la falta de respuestas para este colectivo desde los gobiernos municipal, autonómico y nacional, los tres liderados por el PSOE. «Son muchos los que se plantean marcharse de la ciudad, abandonar incluso España», indicó la también diputada en las Cortes generales. «Otro Toledo es posible», aseveró. La propuesta municipal de Vox incluye un mensaje de «esperanza» para esos jóvenes «intranquilos» que temen por su futuro. La oferta de Vox para esta franja de edad se articula a través de «políticas que, además de la libertad, traigan la prosperidad y un futuro cierto».

En la misma línea se manifestó el candidato de la formación derechista al Gobierno autonómico. Moreno lamentó la elevada cifra de paro juvenil de Castilla-La Mancha, un indicador persistente de mala salud en el mercado laboral, y criticó el estado en que se encuentra la sanidad regional. Como ejemplo de buen hacer contrapuso la gestión en Castilla y León, donde su partido rige junto al PP. «Es un ejemplo de creación de empleo y de generación de prosperidad», subrayó. El líder del partido en la región remarcó la apuesta de Vox contra la despoblación y vinculó el vaciamiento de los pueblos y su consiguiente envejecimiento con la dificultad para el arraigo de las generaciones adolescentes y en la primera edad adulta. «El proyecto de Vox busca que nuestros jóvenes se puedan quedar en la tierra en la que nacieron».

García-Gallardo, por su parte, criticó el discurso del «decrecimiento económico» que impulsa el Gobierno de España y exigió políticas que garanticen más y mejores oportunidades. «Vox tiene un proyecto inequívoco: no vendemos una cosa y después entregamos otra», defendió. Desde el partido reivindican «el desarrollo económico, la defensa de la familia y la soberanía industrial y energética de España» como las claves que identifican su manera de gobernar, aunque la única Administración de calado en la que se han podido testar es la Junta de Castilla y León, en cuyo Ejecutivo participan desde hace apenas un año. Según la figura emergente del partido, estos ejes se van a «desarrollar en todos los gobiernos en los que estemos».

GANAR REPRESENTACIÓN. En Vox esperan mejorar sus resultados en los comicios autonómicos y municipales que se celebrarán el próximo 28 de mayo. «Las expectativas son muy positivas: vamos a ser el partido que mejores resultados va a obtener en relación a los de 2019», añadió su candidata en Toledo. De concretarse el despegue previsto, se redibujará el mapa electoral. «Nuestro objetivo es tener al menos un concejal en todos los pueblos de España», proclamó Cañizares. «Estamos seguros que vamos a tener un gran crecimiento en el conjunto de España», insistió García-Gallardo. La tercera fuerza parlamentaria, con 52 diputados en el Congreso de los Diputados, tiene un número comparativamente inferior de concejales y diputados autonómicos.

La formación no ha deslizado cuántos representantes prevé obtener en la elección simultánea del 28 de mayo en el ámbito de Castilla-La Mancha, una cita de doble nivel, aunque confían en que la suma con el PP les permita desbancar a los socialistas del Palacio de Fuensalida. «Tenemos muchas opciones de entrar en el Gobierno de Castilla-La Mancha», aseguró García-Gallardo. Casi todas las encuestas publicadas durante las últimas semanas estiman la entrada de esta formación en las Cortes regionales; algunos sondeos elevan hasta cuatro el total de representantes que podría obtener.

La correlación de fuerzas entre los dos partidos situados a la derecha del PSOE determinará, en caso de que ambos sumen 17 o más asientos en el antiguo convento de San Gil, una posible coalición de Gobierno o un apoyo puntual externo. «Está muy claro quiénes son nuestros socios, pero vemos mucho hartazgo por esas eternas promesas incumplidas», lamentó el vicepresidente de Castilla y León.