Lamentablemente, se han ido dos puntos más. Aunque no valían más que los demás, sí que podían haber sanado a un CD Toledo que tiene demasiados estímulos alrededor y al que le cuesta centrarse. Lo hizo con la llegada del nuevo entrenador, así es el fútbol, pero Rubén Gala poco pudo hacer por dotar de consistencia a su equipo en la segunda parte. El Socuéllamos neutralizó un 0-2 en el Paquito Giménez después de un penalti absurdo que cambió claramente el desenlace del encuentro.

En general, el aficionado, expectante por el primer once de Rubén Gala, aplaudió la entrada de Oliva en el lateral derecho. Lo demás daba un poco igual. Era más o menos lo mismo. Después del tanteo de cinco minutos, golpearon primero los visitate, con un pase filtrado de Rodri a Angelito, quien entró por la derecha para poner un centro que introdujo Abraham en la portería. Estaba invalidado.

La acción vino de un saque de banda de Carlos Moreno. Hay cosas que no cambian. Tampoco es diferente el juego en el Paquito Giménez a la última vez que pasó por allí el Toledo: mucho juego directo y peligro a balón parado. Lo de jugar vistoso, mejor dejarlo para el Salto del Caballo, ¿no? La siguiente llegada peligrosa se generó con un balón largo a Chupi. Hay cosas que no cambian.

El equipo toledano jugó con su camiseta blanca - Foto: Rocío HellínEl Toledo se encontró con un primer problema, la lesión de Chupi, probablemente el futbolista más en forma en las nueve jornadas anteriores. Rubén Gala reaccionó con Arturo Segado, para cambiar a Angelito a la banda y adelantar a Pepe Delgado.

El Socuéllamos, por su parte, estaba por la labor de atacar rápido. Sus recuperaciones en tres cuartos acabaron siempre en centros al área. Ramón y Carlos Moreno anduvieron atentos para despejar siempre la incomodidad.

En el minuto 22, en un saque de esquina, el CD Toledo sacó partido a todo ese trabajo que venía haciendo en la estrategia. Rodri la puso en el área, y Carlos Moreno, elevándose por encima de todos, dio un toque con la cabeza para ponerla dentro de la portería.

El equipo de Jacinto Trillo aceleró más todavía en sus ataques. No tardó ni seis minutos en poner en apuros a Yelco Ramos. El guardameta estaba tardando en lucirse, y lo hizo en un lanzamiento de Briega con la izquierda, después de deshacerse de Oliva.

Pero el pueblano se resarció de ese error con su primera llegada al área. Combinó con Angelito y la puso atrás para que Manu Gavilán machacara, a la segunda, la red de Bernabé. El encuentro se puso muy de cara, pero el Socuéllamos pudo haber recortado la diferencia en la siguiente acción. Fue un córner cabeceado por Megías. El balón llegó a entrar, pero el '9' hizo falta a un defensor, y lo anuló.

El murciano probó de nuevo con un voleón desde lejos. Se marchó fuera. Las sensaciones eran buenas para los de casa, pero el resultado pesaba demasiado. De ahí al final de la primera parte, no pasó nada más. El CD Toledo se fue a descansar con la satisfacción de haber sido más efectivo que su rival.

Salió entretenida la segunda parte. Las ocasiones se fueron a un lado y a otro, pero sin goles. Chato probó a Yelco Ramos en una falta directa, pero el Socuéllamos no era capaz de derribar el muro instalados por los verdes(de blanco en este partido).

Lo intentaron los azulones de varias maneras. Las segundas jugadas fueron la vía favorita. Y, en una de esas, una descarga a Octa estuvo a punto de entrar por la escuadra. Se desvió unos centímetros el lanzamiento del jugador local. No estaba siendo un asedio, ni mucho menos.

Aun así, Gala movió el banquillo de nuevo para dar entrada a Unax por Abraham. El CD Toledo tenía, aparentemente, el encuentro controlado. En el minuto 72, llegó de nuevo al área socuellamina con un centro de Angelito al área que sacó el portero, por si acaso, porque no había nadie en la zona de remate.

El público del Paquito Giménez se estaba aburriendo. Los visitantes tenían el encuentro anestesiado. Jacinto introdujo más cambios para ver si podía reconducir la situación en el último cuarto de hora. Un gol le daría posibilidades, pero no llegaba. Principalmente, porque Yelco Ramos sigue en su sitio, y de ahí no mueve. Le sacó un gran cabezazo a Megías tras un saque de esquina.En una jugada en la que, al final, Luna acabó cometiendo penalti, al derribar a un atacante. Megías la colocó fuera del alcance del guardameta desde el punto fatídico. El Socuéllamos se creció.

El tercer y último cambio de Rubén Gala fue Fontanello por Oliva, para volver a lo de Carlos Moreno de lateral. Y eso. No llevaba ni diez segundos en el campo el argentino cuando, en una jugada aislada, Megías metió la cabeza entre todos para dejar un balón suelto que Iván Hujo enganchó con la izquierda para ponerla sin piedad en el fondo de las mallas.

Todavía pudo ser peor con una jugada del autor del empate. Dentro del área intentó recortar al portero, pero Yelco le ganó la partida. El encuentro se revolucionó de nuevo, con un posible penalti a Manu Gavilán que el colegiado sacó fuera. El Toledo la verdad es que reaccionó estirándose y, al menos, acabó volcado y metiendo balones al área.