El alcalde de La Iglesuela del Tiétar, Víctor Eduardo Elvira, ha celebrado como una victoria de fútbol el informe de la jefa de servicio de atención a personas mayores de la Junta en la provincia, María de los Ángeles López, que destaca que la construcción de una residencia de mayores en este municipio de la Sierra de San Vicente supone una necesidad para los ancianos vinculados a la localidad. Se trata de un paso más, casi el último, para legalizar la construcción de la residencia que quedó paralizada hace 15 años por estar en Zona de Especial Conservación (ZEC). La celebración se justifica por que Elvira lleva 11 años, casi desde su llegada a la Alcaldía, encadenando trámites para reanudar las obras.
La Iglesuela del Tiétar está encuadrada en la clasificación de intensa despoblación de la Junta de Comunidades. Suma 452 habitantes, de los cuales 183 son mayores de 60 años. «Este municipio no cuenta con servicio residencial para los mayores del pueblo, no hay viviendas para mayores, sí cuenta con SAD (servicio de ayuda a domicilio) para 13 beneficiarios», detalla el informe firmado el pasado 1 de marzo. La residencia más próxima está localizada a 25 kilómetros, en el término de Buenaventura. La residencia es de tamaño medio, con 48 plazas autorizadas, 19 de ellas públicas. «Insuficientes para dar respuesta a la demanda de la zona», explica López.
Un total de 12 mayores que residían en el pueblo trasladaron el expediente administrativo a la vecina comunidad de Castilla y León para tener una plaza cerca de La Iglesuela del Tiétar. Además, repartidos por residencias de la provincia de Toledo, se encuentran 31 mayores de este municipio.
«Está en perfectas condiciones», indicaba ayer a este diario el alcalde sobre la parte construida de la residencia, una iniciativa de hace 15 años de un promotor con arraigo en La Iglesuela del Tiétar que pretendía beneficiar así a sus paisanos. El informe mencionado de la Junta resulta imprescindible para la urbanización en suelo rústico de reserva, catalogación actual de la superficie pendiente de finalización.
El Ayuntamiento de La Iglesuela del Tiétar tramitó primero un Plan de Ordenación Municipal en 2012; posteriormente, logró la calificación de suelo rústico de reserva de los 9.000 metros cuadrados, localizados en Zona de Especial Conservación aunque estén muy cerca del núcleo urbano. Además, el Consistorio ha cambiado las normas subsidiarias.
«A la mayor brevedad posible conseguiremos la calificación urbanística, y con esta se dará la licencia definitiva a la residencia», prevé el alcalde en el mensaje que ha difundido entre los vecinos en esta victoria, de momento, parcial para que La Iglesuela del Tiétar deje de estar tan retirada de una residencia de ancianos.