La vicealcaldesa del Ayuntamiento de Toledo, Inés Cañizares, ha avanzado que desde el Consistorio capitalino, y de la mano de la Diputación provincial, se está estudiando cómo acabar con el asentamiento del Cerro de los Palos, para lo cual planean una estrategia de concienciación a sus pobladores de cara a que se vean respaldados a la hora de aceptar ser realojados, dejando atrás este enclave de la capital regional.

En una entrevista a Europa Press, Cañizares ha apuntado que ya han arrancado esas conversaciones para «erradicar ese asentamiento gitano», toda vez que «en el siglo XXI no puede haber personas que vivan en esas condiciones».

Para ello, y de la mano de la Concejalía con competencias en Bienestar Social comandada por la 'popular' Marisol Illescas, el equipo de Seguridad Ciudadana de Inés Cañizares «está trabajando codo con codo para poder erradicar ese asentamiento».

Con este cometido, tal y como ha señalado, ya se ha «pedido ayuda» a la Diputación por la vía de su vicepresidente segundo, Daniel Arias (Vox), «que lleva el área social» y que es el encargado «para entablar colaboración a través de convenios para poder trabajar sobre este asunto» y que las 40 familias del Cerro de los Palos «puedan tener una vivienda digna».

Se trata de un «trabajo complejo que requiere voluntariedad» por parte de los afectados, por lo cual el punto de partida ha de ser «la decisión de las familias de querer marcharse».

Para ello, se quiere plantear un escenario en el que «se puedan instalar en otras viviendas», por lo que no quiere hablar del concepto de desalojar, ya que en ningún caso se quiere obligar a esta salida.

«Se trata de concienciar a esas familias, que ellos vean por sus propios ojos cómo viven otras familias iguales que ellos, con sus costumbres y sus tradiciones, que ahora están integrados en otros barrios», ha afirmado, abundando en que su intención es hacerles ver que «ese modo de vida les va a beneficiar a ellos y a sus futuras generaciones».