Induráin: «Fede y yo nos respetábamos»

Redacción
-

El pentacampeón del Tour de Francia explica que Bahamontes tenía un «carácter más explosivo, mientras que yo soy más tranquilo». Ambos se conocieron en año 83 cuando Miguel participó en la Vuelta a Toledo

Induráin da el pésame a la familia de Bahamontes.

El pentacampeón del Tour de Francia, Miguel Induráin, ha acudido  a despedir a Federico Martín Bahamontes con el que mantenía «una buena relación» y, pese a que ambos tenían caracteres diferentes, «nos respetábamos». «Éramos diferentes, pero nos apañábamos y combinábamos bien. Nos respetábamos. Él tenía su carácter más explosivo y yo soy más tranquilo», aseguraba Induráin en la capilla ardiente situada en la Sala Capitular del Ayuntamiento de Toledo. Aunque el fallecimiento de Bahamontes le pilló «lejos», el corredor navarro no dudó en acercarse a Toledo a darle el último adiós: «Había que estar aquí en la despedida», subrayaba Induráin que estuvo acompañado por el alcalde de Toledo, Carlos Velázquez.

Miguel y Fede se conocieron en el año 83 cuando el navarro participó en la Vuelta a Toledo, prueba en la que ganó varias etapas. Luego han coincidido en pruebas como el Tour, que ambos ganaron. «En Francia todavía es muy conocido y se recuerdan sus hazañas», recordaba Induráin que señalaba que su forma de correr era diferente a la del 'águila de Toledo'. «Fede tenía un perfil más cercano al de Pedro Delgado, más atacante, más escalador, pero siempre daba consejos: que si el aire, que cómo moverse en los abanicos, el calor, la comida. Y luego, si le hacías caso, bien y si no tampoco le importaba mucho».