Imponen a la Virgen de la Alegría el fajín de Blas Piñar

Redacción
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Un grupo de cofrades muestra su preocupación y desaprobación ante el acto, piden que no se mezcle religión y política, y reiteran su compromiso con la democracia y la Constitución

Imponen a la Virgen de la Alegría el fajín de Blar Piñar

Un grupo de cofrades toledanos ha expresado públicamente su «preocupación y desaprobación ante la reciente imposición del fajín del general Blas Piñar a nuestra amada Virgen de la Alegría». En profundo respeto «por los valores cristianos y la democracia», consideran «que este acto es contrario a los principios que defendemos como cofrades, que incluyen el compromiso con la democracia y la Constitución española».

Reaccionan así ante la imposición este domingo de este complemento militar por el descendiente de Blas Piñar, también general, en el ámbito de una misa en la parroquia de San Andrés, que contó con la presencia de representantes del equipo de Gobierno municipal de PP y Vox, así como de mandos de la Policía Local  y Nacional de la ciudad.Entre los presentes la vicealcaldesa, Inés Cañizares, Daniel Morcillo, Juan María Marín, Ana Pérez Loreto Molina y Juan José Alcalde. 

Sus cofrades defienden que la «Virgen de la Alegría es un símbolo de fe y esperanza para nuestra comunidad desde hace generaciones». Su imagen, venerada en esta ciudad, «nos recuerda los valores cristianos de amor, paz y unidad». Como cofrades, «hemos mantenido una tradición de devoción que ha unido a las personas en momentos de alegría y tristeza, sin importar sus creencias políticas».

De forma que la imposición del fajín del general Blas Piñar, «un personaje asociado con posturas políticas controvertidas y en ocasiones contrarias a los valores democráticos, nos ha llevado a cuestionar la integridad de nuestras creencias religiosas. Creemos firmemente en la separación entre la Iglesia y el Estado y en el respeto a la diversidad de opiniones políticas en nuestra sociedad», señalan. 

Reitera este grupo de cofrades que «la democracia es un pilar fundamental de nuestra convivencia y de nuestro país. Hemos defendido y seguiremos defendiendo los principios democráticos y la Constitución española como un legado que garantiza la igualdad de todos los ciudadanos. La imposición de un símbolo político en un contexto religioso plantea una contradicción que no podemos pasar por alto». Entienden que «la fe y la política pueden coexistir», pero insisten en «la importancia de mantener una separación clara entre ambas esferas. La imposición del fajín del general Blas Piñar a la Virgen de la Alegría parece politizar una tradición religiosa que debería ser respetuosa con todas las opiniones».

«Como cofrades, llamamos a la reflexión sobre este acontecimiento y solicitamos que se respeten los valores cristianos de amor, unidad y tolerancia. Instamos a las autoridades eclesiásticas y locales a considerar los sentimientos de nuestra comunidad y a tomar medidas para preservar la pureza de nuestra fe y la integridad de nuestras creencias democráticas», apuntan, para concluir que «nuestra devoción a la Virgen de la Alegría y nuestro compromiso con la democracia y la Constitución española son pilares inquebrantables en nuestra vida. Esperamos que este comunicado de prensa contribuya a un diálogo constructivo y a una reflexión profunda sobre la relación entre la religión y la política en nuestra sociedad».

Reacciones. Este acto en San Andrés también ha recibido críticas, entre otros, del concejal de IU-Podemos en el Ayuntamiento de Toledo, Txema Fernández, quien ha manifestado en redes que «las leyes, todas, se cumplen. Las económicas asfixian a las familias y no hay reparos en aplicarlas, pero cuando se trata de memoria democrática, parece que no importan: el @toledoayto no puede acudir a un acto donde se ensalza a un golpista de un régimen democrático».