Guinness Word Records ha agilizado esta vez la aprobación del último reto de Christian López, el que hace el número 119 y uno de los más duros que ha realizado el atleta toledano. Fue el pasado 4 de agosto en una calla de su pueblo, Cabañas de la Sagra, cuando empujó un coche de 2.200 kilos durante 100 metros en 40 segundos y 87 centésimas.

Es el nuevo Guinness que tiene en su poder, tras superar al finlandés Jussi Kallioniemi, que lo tenía en 43.06. Como reconoce Christian, "han tardado muy poco, cuando habitualmente son tres o cuatro meses, pero es una alegría muy grande porque siempre tienes dudas de si lo has conseguido o ha habido alguien en cualquier lugar del mundo que te ha superado".

La realidad es que el toledano acumulaba ya varias semanas con entrenamientos enfocados a la tentativa de este desafío. Tuvo un problema para conseguir el vehículo que cumpliera los requisitos exigidos por la organización, pero, finalmente, la empresa OK Mobility le prestó un todoterreno que superaba con creces los 1.800 kilos mínimos que le pedían desde Guinness Word Records.

Christian López consigue su Guinness 119

Christian López confiesa también que este reto le ha generado "mucha tensión y presión", pues "había muchas personas pendientes y, aunque tú crees que lo tienes todo atado, siempre puede pasar algo que no esperas". Por eso, el cabañil ha pasado ahora a una fase de descanso activo, con pequeños trotes, retrorunning y senderismo para descargar las piernas y pensar en próximos objetivos.

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"Es momento de seguir derribando muros", asegura López, que se toma esta tarea de ser la persona con más récords Guinness en el mundo como "un motivo constante de superación". Hay que recordar que padece diabetes tipo 1 desde los 12 años, y eso le ha situado como ejemplo para mucha gente: "Hay personas que te dicen que les das vida, y eso me da una alegría tremenda".