El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) acaba de pronunciarse sobre el plan de refuerzo de cláusulas abusivas que sigue vigente para ofrecer un respiro a aquellos órganos judiciales sobrecargados de esta materia que sigue llegando con fuerza a los juzgados. El juzgado número 5 de Toledo dispondrá de la medida otros seis meses más, hasta el 30 de junio, para intentar sacar adelante todos los asuntos relacionados con estas cláusulas derivadas de las hipotecas.
La Comisión Permanente del CGPJ acordó la semana pasada esta prórroga en once juzgados de primera instancia del país, entre los que se encuentra el de Toledo, dado que el vencimiento de la medida estaba previsto para el 31 de diciembre y urgía tomar una decisión. Al mismo tiempo, también ha dado por finalizado el plan de refuerzo en otros cuatro órganos judiciales -Cádiz, Málaga, Sevilla y Tenerife- en vista de la cantidad de asuntos ingresados en los tres primeros trimestres del año y los pendientes a 30 de septiembre, aunque se deja la puerta abierta otorgando a los tribunales superiores de Justicia la capacidad de valorar la necesidad de apoyo y la exención total o parcial del reparto de asuntos civiles por periodos de tres o seis meses prorrogables.
El plan de especialización de cláusulas abusivas se puso en marcha a mediados de 2017 y se ha ido prorrogando de forma continuada en los órganos que lo necesitan. En este caso, hace seis meses se acordó la prórroga en seis juzgados, se mantuvo la especialización en nueve y se dio por concluida la ayuda en un juzgado.
Actividad. Toledo se sigue manteniendo dentro de este plan de refuerzo porque la actividad judicial aporta cifras importantes que no permiten al juzgado número 5 -que asumía la materia de violencia de género antes de la separación de jurisdicciones- desligarse de la medida. Para mantenerse dentro de la medida, el CGPJ exige un volumen de entrada de asuntos superior a 1.500 durante los tres primeros trimestres y una pendencia de más de 1.500 asuntos a 30 de septiembre.
En este caso, las cifras de entrada de cláusulas abusivas siguen siendo altas en Toledo, aunque el volumen ya no está tan disparado como hace años. Aun así, el CGPJ sigue situando en primera línea al juzgado número 5 a pesar de que en algunos ejercicios no ha cumplido con los estándares exigidos para mantenerse dentro del plan. Si se toman como referencia esos 1.500 asuntos de entrada, Toledo no debería obtener la prórroga, ya que hasta el 30 de septiembre recibió 1.383 asuntos de esta naturaleza, pero lo cierto es que el juzgado acumula una gran carga de trabajo y niveles de pendencia que lo aconsejan, una situación que también avala el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha en sus informes.
No obstante, los datos indican que el juzgado cerrará el año con más asuntos de cláusulas suelo que el año anterior, dado que en 2022 se acumularon 1.639 asuntos, un 0,86% menos que en 2021, y cabe suponer que el último trimestre del año rebasará la cifra aunque hasta el primer trimestre de 2024 no se dará a conocer la estadística.
De momento, el tercer trimestre, de julio a septiembre, ha sido el más activo de los tres analizados a pesar de que agosto se considera inhábil, puesto que se ingresaron 679 asuntos, 403 asuntos más que en segundo trimestre y 251 más que el primero.
A pesar de que las cifras son mucho más modestas que la de 2018 y 2019, con 10.500 y 6.637 demandas de cláusulas abusivas respectivamente en Toledo, esta materia todavía provoca efectos colaterales en otros órganos judiciales como ocurre con la Audiencia Provincial, que también se encuentra un tanto desbordada a lo largo del año porque de cada tres asuntos civiles que recibe, dos son de cláusulas abusivas y obligan a una exigente organización interna de los magistrados para evitar que esta materia retrase al resto.