Tres nuevas pasarelas harán más accesible la senda ecológica

J. Monroy
-

El Ayuntamiento ha sacado a licitación por 254.710 euros las obras de rehabilitación de ribera en el tramo entre el puente de San Martín y los molinos de Daicán

Tres nuevas pasarelas harán más accesible la senda ecológica - Foto: David Pérez

El Ayuntamiento de Toledo va a instalar en la senda ecológica del Tajo tres nuevas pasarelas peatonales, que facilitará su tránsito, además de mejorar el firme bajo el puente de Alcántara y la pronunciada rampa junto a los molinos de Santa Ana. Todo ello será en un tramo de 615 metros, entre el propio puente y los molinos de Daicán, en una obra que la Junta de Gobierno Local ha sacado a licitación por 254.710,18 euros.

Se trata de la Ejecución de las obras comprendidas en el Proyecto Técnico de Rehabilitación de Ribera en el tramo entre el puente de San Martín y los molinos de Daicán, un proyecto cofinanciado en un 80 por ciento por los fondos Feder en el marco del programa Edusi, que ha redactado el arquitecto José Luis Juzgado.

Recoge dicho proyecto que dentro del Casco histórico, Patrimonio de la Humanidad, existen más de cien monumentos y cuenta además con varias zonas arqueológicas, «es un ejemplo de cómo la mano del hombre es capaz de conseguir un espacio de gran riqueza paisajística vinculada a un gran valor histórico y cultural, si bien, resulta fundamental la ejecución de una serie de actuaciones que consigan fundir el Tajo con Toledo tanto para los vecinos de la ciudad, como una nueva forma de usar y disfrutar el río, como para los visitantes, incorporando una nueva forma de contemplar y acceder a la ciudad, generando espacios públicos de referencia junto al río y poniendo en valor el potencial natural y ecológico de la zona».

Tres nuevas pasarelas harán más accesible la senda ecológicaTres nuevas pasarelas harán más accesible la senda ecológica - Foto: David PérezPara ello, el Ayuntamiento ha propuesto diversas actuaciones en la ribera, en su margen y su paso por el Casco histórico. Uno de los tramos, de aproximadamente 615 metros de longitud, la parte más natural y menos humanizada del trazado, va desde los molinos del Daicán hasta el puente de San Martín, pasando junto al molino de Santa Ana. Este es el tramo cuyo proyecto el Consistorio acaba de sacar a licitación. Actualmente, recoge el proyecto, este tramo tiene algunos tramos de difícil paso, por las caídas de rocas desde las zonas superiores por los rodaderos, además de algunos puntos en los que el paso del agua de escorrentías hacia el río ha producido lavados del terreno y zonas en mal estado. Por otro lado, la diferencia de cota existente en la zona de los molinos de Santa Ana genera una discontinuidad en el recorrido, solventada con una especie de escalera estirada sobre el terreno, y una zona de hormigonado lateral en pésimas condiciones. Por otro lado, «es una zona de singular belleza, pese a su aparente abandono, o gracias al mismo…», apunta el informe.

En consecuencia, el proyecto busca rehabilitar la senda en los puntos en los que actualmente presenta problemas de acabados o de conexiones. Y lo quiere hacer con un tratamiento natural, que respete y potencie las cualidades actuales y la riqueza multifuncional de esta zona de la ribera del río. Buscará en todo momento la integración paisajística y ambiental.

Se trata en definitiva de un proyecto la mejora del tramo de senda  y de sus condiciones de conservación, pavimentos y eliminación de obstáculos. Incluye actuaciones a nivel  general y cinco propuestas concretas de intervenciones específicas en zonas localizadas.

Tres nuevas pasarelas harán más accesible la senda ecológicaTres nuevas pasarelas harán más accesible la senda ecológica - Foto: David PérezActuaciones. A lo largo de este tramo el proyecto recoge pequeñas y puntuales actuaciones destinadas a mejorar el pavimento, como retirando piedras, geotextil somero, raíces y bacheado. Se trata de actuaciones menores, al margen de las cinco de mayor calado, a lo largo de los 615 metros de senda, que ocupan una superficie aproximada de 1.691,25 metros cuadrados.

A esta actuación general, se suma otra de adoquinado en el tramo de senda en la zona inferior del puente de San Martín, de 33,12 metros, un paso serpenteante jalonado por un lateral por las contenciones del talud mediante tablones de madera y por el otro con un importante desnivel en caída hacia el río. Allí, las escorrentías de agua del talud han bacheado el pavimento. Los días de lluvia el tránsito por esta zona es peligroso. De ahí que una simple intervención de mejora del pavimento no parezca suficiente. El Ayuntamiento ejecutará una base rígida mediante una solera de hormigón (que será una losa en la zona de desagüe de la vaguada) y un acabado de adoquín de granito, similar al existente unos pocos metros mas adelante, para así dar continuidad a un pavimento estable, donde un firme granular no se considera apto.

La segunda actuación abordará la rampa escalonada de que existe bordeando las edificaciones del molino y azud de Santa Ana, uno de los puntos mas complicados de la senda en su recorrido en torno al Casco histórico de Toledo, que salva un importante desnivel de siete metros y medio en 32,5, con una pendiente media del 23,07 por ciento. La rampa está escalonada con peldaños en pendiente de un ancho medio de 145 centímetros y de una profundidad de 120. En su lateral hacia el río, la escalera cuenta con una zona hormigonada, a modo de rampa, que se encuentra en bastante mal estado. En definitiva, se trata de una zona no accesible ni ciclable, complejo de transitar con bicicletas, con carritos de niños, etc. El proyecto recoge que la solución óptima pasaría por realizar un nuevo trazado en rampa en los taludes situados al interior de la escalera existente. Pero esta solución presenta un coste económico que no es abordable en estos momentos, por lo que como alternativa, el Ayuntamiento mejorará el pavimento de hormigón en la rampa existente, ampliando su ámbito, dotándolo de un acabado ruleteado más adherente e iluminado el recorrido para hacerlo más seguro.

Tres nuevas pasarelas harán más accesible la senda ecológicaTres nuevas pasarelas harán más accesible la senda ecológica - Foto: David PérezOtro punto conflictivo es una escalera con pasarela, donde el arquitecto no entiende por qué, cuando se realizaron los trabajos de la senda, se decidió separarse de la ribera y encaramar el recorrido mediante una escalera a un bolo de granito para inmediatamente volverlo a bajar de la misma manera, «cuando existe una posibilidad mucho mas lógica de continuar el trazado junto al margen del río». Dado que se trata de una zona inundable, la alternativa pasa por realizar una pasarela tallando para ello una primera roca e integrándola entre los arboles existentes, para desembocar, una vez superada la escalera, mejorando las condiciones de accesibilidad y ciclabilidad de esta parte de la senda. Será una pasarela de geometría quebrada en nueve tramos no mayores de tres metros de largo y un ancho mínimo de metros y medio, con una estructura metálica, apoyado en catorce pilares enanos circulares diámetro de 14 centímetros. Los pilares que sobreelevan la pasarela permiten que la escorrentía de las aguas de lluvia puedan discurrir bajo la pasarela así como las posibles crecidas del río.

La segunda pasarela peatonal que contempla el proyecto estará en el tramo en zigzag que se desarrolla inmediatamente a continuación del anterior, muy cerca del borde del río y por lo tanto del agua. Recoge el proyecto que «esta parte discurre a modo de slalon entre las rocas de mediano tamaño que aparecen en el camino, algunas están someras y otras casi enterradas, en algunos momentos el ancho útil se reduce por debajo de los 65 centímetros». Aquí la cercanía del agua impide ensanchar el camino. La solución propuesta es perfilar y recortar algunas rocas, al tiempo que se desplaza una de ellas, para así ubicar una pasarela con el mismo sistema constructivo que la anterior, en cuatro  tramos no mayores de tres metros, en este caso apoyada sobre diez pilares.

Tres nuevas pasarelas harán más accesible la senda ecológica
Tres nuevas pasarelas harán más accesible la senda ecológica - Foto: David Pérez
Y la tercera pasarela se prevé en una zona situada entorno a una pequeña fuente, muy cerca del agua. Hace años hubo un pequeño puentecillo de troncos que salvaba el barrizal que habitualmente existe entorno a la fuente de la que suele manar agua todo el año. Actualmente no hay ningún medio técnico para atravesar este espacio. El sitio presenta unas vistas espectaculares del puente de San Martín, de algunos cigarrales, del valle y del fabuloso peñasco sobre el que se asienta la ermita de Santa María de la Cabeza. Pero es un espacio complicado para peatones y ciclistas pues siempre hay barro al no estar la fuente contenida adecuadamente con un pilón y un desagüe que conduzca el agua hasta el río. El espacio existente no posibilita desviar la senda por otro lado, pues los taludes de la ciudad están muy próximos y el río toca el camino en este punto, estando la cota del agua muy cercana a la de la senda. Para solucionarlo, el Ayuntamiento instalará esta tercera pasarela, que bordeará la fuente con el mismo sistema constructivo que las anteriores. Pero en este caso presentará un ensanchamiento en la zona de la fuente para que además de transitar por este espacio de un modo seguro, el caminante, se detenga un momento a disfrutar las vistas. Serán cinco tramos de 3,8 metros de largo y dos y medio de ancho.