La Catedral de Toledo encara lo que será una inminente cuenta atrás para celebrar su octavo centenario. El templo primado ya cuenta con algunas propuestas en firme para conmemorar la efeméride que se cumplirá en 2026.
Entre los planteamientos conocidos, está la solicitud de declaración del Año Jubilar de la Catedral de Toledo para el curso 2026-2027, la celebración de un Congreso Eucarístico Nacional o la realización de una gran exposición que impulsará la recién creada Fundación 'Primatelis Sedis Toledana', o el Proyecto Lumia, que pretende dotar de «un espectáculo de música y luz incomparable» al interior de la Seo toledana, y que se realizará en horario nocturno, tal y como explicaba a La Tribuna el deán de la Catedral Juan Pedro Sánchez Gamero, al término de la visita al templo por parte de la ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, Isabel Rodríguez.
La visita se enmarcó en el contexto de la conclusión de las obras de restauración de la techumbre exterior del trasparente de la Catedral. Según explicó el propio deán, una actuación de «entorno a un millón de euros», que el Gobierno central ha financiado íntegramente y que viene motivada por el mal estado de la pizarra, acentuado tras Filomena. Ahora, por un importe que rondará los 500.000 euros, será el Arzobispado quien restaure las pinturas que, a causa de las filtraciones de agua, han quedado dañadas.
Precisamente durante la presencia de la representante institucional, Sánchez Gamero, aprovechó la ocasión para pedir la implicación del Gobierno en la conmemoración de la colocación de la primera piedra del templo en 1226, algo para lo que Rodríguez mostró su predisposición «bien a través del Ministerio de Cultura o el de Turismo».
Tal y como ha podido conocer este medio, la petición que el deán ha trasladado a la ministra, es la de la necesidad de restauración que arroja la fachada sur del templo, que «a causa de la erosión y paso del tiempo», necesita rehabilitaciones «principalmente en pináculos y otros elementos que podrían desprenderse y comprometer la seguridad». A priori, según palabras de Sánchez Gamero, los cimientos del templo en este punto no necesitarían ninguna acometida, aunque «antes de la redacción del proyecto, se comprobará el estado real y si es necesario llevar a cabo alguna actuación», declaró.
En la misma línea se había expresado el arzobispo de Toledo, Francisco Cerro, quien en lo referente al VIII Centenario, pidió «delicadez» al Gobierno, mostrando su preocupación por la seguridad y conservación del patrimonio.
ADEMÁS. El deán de la Catedral de Toledo, Juan Pedro Sánchez Gamero, desveló que otra de las peticiones a la ministra es la consideración de que el VIII Centenario sea declarado de Interés Cultural. Con ello, según pormenorizó, aquellas empresas privadas que decidan colaborar obtendrían el derecho a una deducción en la cuota del importe de las inversiones y gastos que realicen. Según parece, la ministra de Política Territorial debió tomar buena cuenta, pues en sus declaraciones deslizó la voluntad de «implicar también al sector privado».