El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana va cumplimentando los pasos para que el carril bici que unirá los barrios de Santa Bárbara y el Polígono sea una realidad. Hace semanas que esta cartera del Estado adelantó en nota de prensa la licitación de esta intervención en la ciudad, pero no ha sido hasta ahora cuando ha procedido a publicarla en el Boletín Oficial del Estado. 

Este documento ofrece toda la información posible acerca de esta intervención prevista para mejorar las condiciones de seguridad de peatones y ciclistas. El caso es que este carril bici se extenderá a lo largo de ocho kilómetros de distancia por dos márgenes diferentes, el izquierdo a la TO-23 que se iniciará en la glorieta de Santa Bárbara y el derecho que comenzará en la calle Río Arlés y continuará hasta el final del Polígono hasta la calle Ventalomar. La conexión entre ambos márgenes se cumplimentará con una futura rotonda -inmersa en otro proyecto para esta zona, el conocido como el del tercer carril, ya que será la que genere la incorporación al nuevo formato de circulación aún por licitar- y por la construcción de una pasarela peatonal y ciclista, que se prevé como una de las intervenciones más reseñables del proyecto.

De forma más concreta, el inicio del carril bici se formará en la intersección de la citada glorieta de Santa Bárbara y la vía Huerta Rosa, transcurriendo en un primer tramo por el corredor de una antigua vía ferroviaria hoy desmontada y de la que solo existe el balasto de la vía. Este primer tramo finalizará en la calle Río Jarama y, por petición del Ayuntamiento de Toledo, el carril se realizará en firme de zahorra artificial recebada en una superficie con polvo de sílice. Ya en la calle Río Jarama la nueva vía ciclista continuará por un carril bici ya construido en la zona. La nueva vía por tanto avanzará hacia Santa María de Benquerencia dejando a su izquierda el Polígono industrial y a su derecha la TO-23.

El carril tendrá a la izquierda el AVE y la zona industrial y a la derecha la TO-23. - Foto: David PérezEl carril ciclista que se proyecta continúa a partir de la calle Río Marchés cruzando la TO-23, iniciándose en este nuevo bando paralelo a la TO-23 por la vía verde ubicada entre las calles Río Arlés y Río Estenilla. Sin embargo, antes de llegar a esta zona, el carril deberá esperar a la creación de la nueva glorieta mencionada previamente para poder comunicar la calle Río Jarama con Río Marchés.

Tras esta glorieta y la pasarela ciclista y peatonal, el carril bici continuará proyectándose por un nuevo camino entre el acerado existente actualmente y los cerramientos de las parcelas, al tratarse de un espacio poco poblado de vegetación. Desde Río Estenilla y hasta su final en Ventalomar el carril bici se abordará sobre un acerado existente que se demolerá para construir la vía sobre él.

Las dimensiones de la vía ciclista alcanzarán los cuatro metros de ancho en el primer tramo entre Santa Bárbara y la calle Río Jarama y de dos y medio en el resto de la vía, salvo el tramo entre Río Guadarrama y Ventalomar que tendrá tres metros de ancho.

En un primer momento, el proyecto pretendía que fueran tres pasarelas en vez de una las que comunicaran los dos márgenes, pero fue el Consistorio toledano el que dictó que sólo se construyera la que unirá Río Marchés y Río Arlés sobre el paso inferior soterrado de la TO-23.

La intervención total de este carril bici cuenta con un presupuesto de 4,2 millones de euros y también incluye la sustitución de las luminarias actuales por nuevas LED a lo largo del recorrido. El plazo de ejecución del proyecto es de 12 meses.