Estalla una protesta vecinal para expulsar a una familia conflictiva

J.A.J./Toledo
-

Decenas de personas se concentran ante la casa de un grupo conocido como 'los macacos' para exigir su marcha tras varios robos y el apuñalamiento de dos vecinos en una pelea

Decenas de vecinos se congregaron ante la vivienda del clan. - Foto: Yolanda Lancha

Una riña tumultuaria sucedida en la mañana de ayer sábado en Mora ha sido la gota que ha colmado la paciencia de muchos vecinos contra un clan familiar al que responsabilizan de un gran número de robos y otros delitos cometidos en la localidad en los últimos tiempos. En la tarde, decenas de personas  (unas 300, según testigos presenciales) se concentraban ante la vivienda de este grupo para reclamar su marcha del municipio. Numerosos efectivos de la Guardia Civil, junto a la Policía Local, tuvieron que acordonar la casa para evitar que fuera asaltada. Este despliegue de agentes  continuaba al cierre de esta información.

Según ha podido saber este medio, este suceso arrancaba en la mañana con una pelea multitudinaria entre miembros del clan, conocido como ‘los macacos’, y vecinos de Mora, por causas aún no aclaradas. En el transcurso de la riña, uno de ‘los macacos’ apuñalaba con un cuchillo de cocina a una persona en la espalda y a otra en una mano. Estos hombres resultaron heridos leves, según confirmaron fuentes de la Delegación de Gobierno, aunque el herido en la espalda precisó atención en el Hospital Virgen de la Salud de Toledo capital.  

Esto llevó a un gran número de vecinos a denunciar los hechos en el cuartel de la Guardia Civil, acompañados por el alcalde Emilio Bravo. El regidor expresaba su comprensión ante el hartazgo de sus conciudadanos frente a «unos delincuentes». Así los definía tras recordar sus antecedentes policiales y su implicación en diversos delitos que han enervado la paciencia de los morachos. «No podemos soportar a esta gente en un pueblo tranquilo como es Mora». declaraba.

La Guardia Civil acordonó la entrada a la vivienda para evitar enfrentamientos.La Guardia Civil acordonó la entrada a la vivienda para evitar enfrentamientos. - Foto: Yolanda Lancha Aún así, el alcalde hacía un llamamiento a sus paisanos a conservar la calma y dejar actuar a la Justicia, añadiendo que ha puesto en conocimiento de la Delegación de Gobierno los problemas de convivencia provocados por este clan familiar. Y es que la Guardia Civil detuvo al responsable de la puñalada e identificó a otros participantes en la pelea, pero esto no resulto suficiente para muchos vecinos.  Así, se fue congregando la gente ante la vivienda del clan, situada en la calle Metro, con el propósito de exigir su marcha al achacarles también su presunta implicación en hasta tres robos en casas sucedidos en los últimos días. Los efectivos de la Guardia Civil, llegados en una docena de vehículos, constituyeron un cordón de seguridad ante el inmueble para evitar males mayores. Además, intentaron calmar los ánimos de los vecinos advirtiéndoles sobre las consecuencias que tendría el que  intentaran tomarse la Justicia por su mano. «Sacarlos», «que se los lleven», pedían vecinos exaltados por los acontecimientos.

A última hora de la tarde, la tensión disminuyó al irse parte de los concentrados, aunque otros continuaban frente a la vivienda. Un coche del clan resultó severamente dañado por los manifestantes.