Irene Sánchez-Escribano ya acumula unas cuantas semanas de pretemporada. De momento, la atleta toledana se está ejercitando a medio gas porque "luego la temporada se hace muy larga". Los primeros entrenamientos, después de un leve parón, están enfocados a preparar la temporada de cross, aunque es verdad que en el horizonte está la gran cita del año, en 2024, con los Juegos Olímpicos de París.

Por eso, la corredora del Adidas prefiere ir con pies de plomo. Este jueves corre la Milla de Jaén, mientras que el próximo domingo estará en la Milla Internacional de Bilbao. No quiere faltar a la cita que Tokio ya le robó por una inoportuna lesión a apenas diez días de viajar a la capital japonesa. "No tiene por qué pasar lo mismo, pero es verdad que es algo que una tiene en la cabeza", reconoce Sánchez-Escribano, que antes le apetece encarar el resto de retos del curso.

Como en años anteriores, la toledana siempre ofrece un gran rendimiento en el barro, y, además, los entrenamientos le sirven para fortalecer las piernas de cara luego a la pista y a los 3.000 obstáculos. Evidentemente, más allá de acumular puntos en las pruebas de cross más importantes del panorama nacional, Sánchez-Escribano querrá ganarse un hueco en la selección española que estará en el Europeo de Campo a Través, que se celebrará el 10 de diciembre en Bruselas (Bélgica). La primera cita será el próximo 29 de octubre, en Burgos, con el Cross de Atapuerca, de cuyo vídeo promocional, publicado estos días, es la protagonista.

Asimismo, tras dos años sin poder revalidar el título de campeona de España de la especialidad, otra de sus metas. A partir de ahí, será el momento de pensar en el tartán, en los obstáculos y en llegar a París en las mejores condiciones posibles. Porque el gran sueño de esta temporada para Irene Sánchez-Escribano es el de ser olímpica. Por fin.