La Consejería de Sanidad del Gobierno regional ha confirmado la existencia de un caso de sarna en el centro de mayores 'Casablanca' de Talavera, que ya se está tratando de forma global  en el centro para conseguir su total erradicación. En coordinación con la Unidad de Apoyo a Residencias y el Departamento de Epidemiología del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam), se trabaja para eliminar la infección que tiene un caso confirmado y otros cuatro en estudio, por contactos con el primero.  

Desde Sanidad recuerdan que no existe brote, ya que estos se contabilizan a partir de los tres casos confirmados.

La directora general de Salud Pública, Laura Ruiz, confirmó que hasta el momento solo uno se ha confirmado como sarna mientras que los otros cuatro siguen como sospechosos. En rueda de prensa, Ruiz explica que se trata de una enfermedad «molesta, que hay que detectar, diagnosticar y tratar, pero que no debe de causar una alarma especial».

Así, desde su detección, se está aplicando en la residencia el protocolo de actuación recomendado, centrado principalmente en tareas de desinfección. «El mayor problema que tenemos con la sarna en residencias es que es muy importante hacer un tratamiento conjunto, todos a la vez, residentes y trabajadores, y en elementos y objetos, como las sábanas, además de los contactos, para que sea eficaz y poder eliminarlo de la residencia», explica la directora general.

Incremento de casos. La responsable regional de Salud Pública confirmó que, según han alertado los dermatólogos, existe un incremento de casos de sarna en los últimos tiempos no solo en las residencias de mayores sino en la población en general, no obstante, añadió, «las residencias reflejan lo que sucede afuera». Con todo, envió un mensaje de tranquilidad.

Desde la dirección del centro de mayores de Talavera, según informa Europa Press, se han puesto en contacto con los familiares a quienes han  informado del caso de sarna o escabiosis detectado en la residencia. Les explican que se trata de una enfermedad infecto-contagiosa con alta transmisibilidad por contacto estrecho y a través de la ropa y tejidos de tapicería de muebles contaminados, y que se produce por un ácaro que hace pequeños surcos en la piel y donde el prurito (picor) es el síntoma más molesto. Asimismo, señalan que no es una  enfermedad grave, que afecta a  cualquier grupo de edad, y que los casos han aumentado tras el confinamiento del Covid.

Desde Casablanca describen un tratamiento con higiene personal y lavado de la ropa a altas temperaturas y otro farmacológico con cremas y pomadas y comprimidos vía oral.

En cuanto al tratamiento a seguir, aseguran que se tratará a los residentes infectados o con posibilidad de estarlo «con ambas líneas de tratamiento» y se contactará con las familias de los pacientes afectados e informará más detalladamente de cada caso en particular». La intervención está siendo coordinada con los profesionales sanitarios de la residencia, la Unidad de Apoyo a Residencias y el Departamento de Epidemiología del Sescam.

El Ayuntamiento, informado del caso por el centro y la consejería de Sanidad, asegura que se trata de un «tema  puntual», indica el portavoz del equipo de Gobierno, Jesús García-Barroso.