Rara vez los ayuntamientos se enfrentan. Pero la avería de Picadas ha desencadenado un cruce de acusaciones y amenazas de denuncias en los juzgados entre Ugena y Carranque, por lo que las consecuencias de la DANA quizá se diriman también en los juzgados.

El Ayuntamiento de Carranque explicaba durante el fin de semana que se trata del último municipio que recibe el suministro ahora mismo del embalse de Almoguera. «Lo recibimos cuando se llena el resto de los depósitos de los demás pueblos, en función de unos litros diarios asignados por población», asevera. Así, el Consistorio afirma que buscó alternativas.

En este sentido, acusaba al Ayuntamiento de Ugena de tener agua por su negativa a cerrar los depósitos de agua durante unas horas. «Ha impedido que llegue agua a nuestro pueblo. Nos asombra sobremanera que, ante una desgracia de esta índole, estemos tan deshumanizados, e incluso algunos pueblos sin abastecimiento de ningún tipo», subrayaba.

«El motivo por el que Ugena sí tiene agua es porque lleva una gestión del agua directa y responsable», explica el equipo de Gobierno de este municipio, que detalla que los depósitos generales de agua de la localidad estaban llenos antes de la avería.

Asimismo, el Ayuntamiento de Ugena, que amenaza con acciones legales contra las injurias, señala que ha ayudado a la empresa Aqualia, como responsable del suministro del embalse de Picadas, con agua no potable procedente de pozos municipales para abastecer a localidades vecinas.

«El Ayuntamiento de Carranque debería cumplir con la Mancomunidad de La Sagra y con Aguas de Castilla-La Mancha y saldar de esta forma la alta deuda que acumula su municipio y no culpar al municipio vecino de su nefasta gestión», resalta el equipo de Gobierno de Ugena, que apunta directamente a la actual alcaldesa, Amelia María Guzmán. «Se comprometió a principios de la legislatura anterior a saldar esa deuda, y a día de hoy, continúa, siendo ella alcaldesa y teniendo los mecanismos para poderla saldar», resalta.