El presidente de la Real Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, ha protagonizado este martes los Desayunos Deportivos de Europa Press.

Entre los temas abordados se refirió al conflicto entre el organismo federativo que preside y una buen número de clubes de Primera Federación, entre ellos el CF Talavera, que se oponen al modelo de control económico que quiere implantar la RFEF.

Sobre el futuro de la categoría, manifestó que podría cambiar su formato actual, y advirtió que «si hay alarma es porque hay quien quiere venderlo así». «Nació como una categoría experimental, no se engañó a nadie y si funcionaba, bien, y si no, se volvería en tres o cuatro años al modelo anterior. Todos los clubes están informados y quien vea en esto una alarma no está trasladando la verdad», remarcó.

El ex jugador se mostró crítico con que 16 clubes hayan «filtrado» una carta cuando ellos se comunican con los equipos «antes que con nadie» y aseveró que su organismo «no intenta implantar» nada. «Lo que no podemos hacer es poner 'veintitantos millones para 40 clubes y que generen deuda, no lo podemos consentir. Hay diferentes opciones sobre la mesa y antes de acabar la temporada se tomará una decisión, pero digo para la temporada que viene», explicó.

En este sentido, confirmó que ya se ha producido una votación entre los clubes y que «es falso que 20 estén en contra del control económico». «La inmensa mayoría está a favor y que sea la RFEF la que lo implante. Nuestra obligación es la de escuchar a clubes, futbolistas, entrenadores y árbitros», resaltó el mandatario.

Precisamente, el presidente del CF Talavera, Josué Blázquez, indicó la semana pasada a este diario, que los clubes no se oponen al control económico, todo lo contrario, pero critican el excesivo intervencionismo que la Real Federación Española de Fútbol ejercería a través de los modelos actualmente propuestos.

En el último escrito remitido a la Real Federación Española de Fútbol los clubes opositores criticaban «la imposición de modelos que coartan nuestra libertad de obrar o la firma de cheques en blanco para que se nos impongan reglamentaciones no acordes con la actual normativa federativa».