En los 44 años de ayuntamientos democráticos, desde la Transición, los políticos talaveranos han demostrado mucha cintura a la hora de negociar acuerdos. Ha habido pactos siempre que se ha necesitado para alcanzar la mayoría absoluta, aunque en no pocas ocasiones tardara muy poco en revelarse su precariedad. A veces, no todas, han sido acuerdos públicos, con luz y taquígrafos, pero también los ha habido tácitos o negociados en secreto. El pacto de gobierno entre PP y Vox es un capítulo más en una dinámica que ha estado vigente en el Ayuntamiento talaverano desde la primera Corporación democrática, elegida en 1979, y que se ha reeditado después hasta en seis legislaturas, en una ocasiones para dar el bastón de mando al PP, como ha ocurrido esta legislatura, y en otras para entregárselo al PSOE.

En los partidos políticos talaveranos se sabe mucho de pactos, incluso de algunos imposibles. De hecho, la aritmética más difícil que se ha cuadrado en el Ayuntamiento talaverano se consiguió en 1987 con un pacto tripartito en el que se repartieron el gobierno Alianza Popular (primera denominación del Partido Popular), Centro Democrático y Social (el partido liderado por Adolfo Suárez, tras la disolución de UCD) y, ¡atención!, Izquierda Unida. Merced a un pacto a todas luces antinatura, fue elegido alcalde Luis Antonio González Madrid, del CDS, con cinco concejales. Los seis de AP y los dos de IU apoyaron la moción, con el objetivo de desbancar al socialista PabloTello, que después de cuatro años de mayoría absolutísima, con 16 concejales, y de dos mandatos como alcalde, se había quedado con 12.

Lo que en el argot político actual se conoce como «pactos de perdedores» no es, por tanto, nada nuevo; ya estaba inventado en Talavera desde 1987. Aquel tripartito duró pocó y aprovechando las fisuras que se generaron en IU, el PSOE consiguió llevarse a su terreno a uno de los dos concejales de la formación, y colocar en la Alcaldía a Javier Corrochano por medio de  una moción de censura en febrero de 1990. 

En aquella tercera legislatura llegó a haber, por tanto, dos pactos de gobierno, de signo político opuesto. Esa predilección por  el pactismo se ha manifestado después en cinco legislaturas, más, incluida la actual. De hecho, así se empezó en 1979 y se siguió en 1987, 1991, 1995, y 2015. Es decir, el pacto ha sido la fórmula de gobierno articulada siempre que no ha habido mayoría absolutas de ningún partido. 

En materia de mayoría absolutas, el PSOE gana por goleada. Ha gobernado sin necesidad de apoyos en 1983 (Pablo Tello), 1999, 2003 y 2007 (las tres legislaturas de José Francisco Rivas) y en 2019 (Tita García Élez). El PP solo ha disfrutado de mayoría absoluta en 2011 con Gonzalo Lago. El resto de sus  gobiernos han sido apoyándose en Acción por la Comarca de Talavera (el partido que fundó Pablo Tello cuando abandonó el PSOE), Ciudadanos (2015) y ahora en Vox. 

El PSOE, por su parte, ha estado en la Alcaldía con el respaldo del PCE (Partido Comunista de España) y el Partido de los Trabajadores (1979), y en dos ocasiones con el voto de IU, o al menos de alguno de sus concejales (1990 y 1991).

1979, García de Castro y Pablo Tello

El partido del entonces presidente del Gobierno Adolfo Suárez gana las elecciones, pero se queda en minoría frente a las formaciones de izquierda y será el socialista Jesús García de Castro quien salga elegido alcalde. En pocos meses dimite y da paso a un extremeño que había forjado su perfil político como emigrante en Francia, Pablo Tello Díaz, sin duda una de las identidades más marcadas que han pasado a lo largo de casi cuatro décadas por la Alcaldía de Talavera. En aquel momento inició una andadura que duraría hasta 1987.

1983, los años del desarrollo

Ni la España ni la Talavera de aquellos años tienen demasiado que ver con la actual. Faltaban las infraestructuras más elementales (el agua corriente en muchos pueblos de Castilla-La Mancha) y todo estaba por construir. Hijo de su tiempo, un triunfal Pablo Tello aprovecha para continuar desarrollando un modelo con grandes obras y proyectos sobre los que se va a asentar el futuro de la ciudad. Las urnas le habían concedido 16 de los 25 concejales de la Corporación, el mejor resultado que hasta la fecha ha registrado ningún partido en Talavera.

1987, pacto imposible y moción de censura

Desgastado por 8 años de gobierno y por la presión de su propio partido, Tello pierde la mayoría absoluta, aunque mantiene al PSOE como formación más votada. El gobierno se resuelve en una alianza de todos contra él, en la que AP (el origen del PP) y CDS se unen con los dos concejales de IU para gobernar. Durante dos años se mantiene en la Alcaldía Luis Antonio González Madrid (CDS), hasta que el socialista Javier Corrochano pone fin a la inestabilidad con una moción de censura.

1991, lucha en el PSOE

Corrochano consigue una precaria mayoría que solo puede sostener con el apoyo de IU, ante la irrupción en el escenario municipal de Acción por la Comarca de Talavera, el partido que crea el exalcalde Pablo Tello, tras su salida del PSOE. La debilidad y las luchas intestinas hacen dimitir a Corrochano, sustituido por su compañero Isidro Flores.

1995, primer alcalde del Partido Popular

Con 11 concejales propios y el apoyo de Actal, Florentino Carriches se convierte en el primer alcalde del Partido Popular en Talavera, mientras el PSOE, con Flores como candidato, cae a diez concejales. El voto se dispersa hasta en cuatro partidos políticos en una legislatura un tanto convulsa, sobre todo por el enfrentamiento permanente entre el Ayuntamiento y la Junta de Comunidades, encabezada por José Bono (PSOE).

1999-2011, los años de la era Rivas 

Después de años agitados, José Francisco Rivas recupera para el PSOE el gobierno de la segunda ciudad. En contra de los pronósticos, agrupa el voto de la izquierda, que le concede una holgada mayoría absoluta mientras deja fuera del consistorio a IU. Será el primero de los tres mandatos de Rivas, todos ellos con mayoría absoluta y con un ayuntamiento sumido en el bipartidismo.

2011, Lago da mayoría absoluta al PP

La crisis económica, el desgaste lógico de 12 años en el Ayuntamiento y el descrédito en que cae el presidente Rodríguez Zapatero se suman en contra de José Francisco Rivas, que no consigue un cuarto mandato municipal. Gonzalo Lago le gana la partida dando la vuelta al resultado de los comicios anteriores con la primera mayoría absoluta del PP en el Ayuntamiento de Talavera, la única hasta ahora, y el regreso después de 12 años de IU al Pleno. El prematuro fallecimiento de Lago en agosto de 2014 impulsa a Jaime Ramos a la Alcaldía desde la que concurre a las siguientes elecciones como candidato del PP.

2015, el pacto de estabilidad de Jaime Ramos

Se quedó a dos concejales de la mayoría absoluta pero Jaime Ramos tardó poco en encontrar el apoyo de los dos ediles de Ciudadanos, primero para su investidura y después, expulsados de la formación por la que fueron elegidos, como miembros del equipo de gobierno. 

2019, el PSOE vuelve con  mayoría absoluta

Tita García Élez consigue una holgada mayoría absoluta y rompe la racha de gobierno del PP. Asume el Ayuntamiento con catorce concejales, frente a u mermado PP con cinco, 3 de Ciudadanos y 3 de Vox enfrente. 

2023, el pacto PP-Vox

Los resultados electorales dejan al PSOE con doce concejales, a uno de la mayoría absoluta, lo que propicia un pacto de gobierno entre PPy Vox. La formación de David Moreno apoya la investidura de José Julián Gregorio y entra en el ejecutivo local con varias delegaciones.  El alcalde asegura que el gobierno será un bloque, sin distinción de partidos.