El presidente de la Mancomunidad del río Pusa y alcalde de San Martín de Pusa, Alberto Lucero, airea su desánimo. «Estamos igual de mal. O peor», lamentaba ayer en palabras a este diario. La nefasta cuenta atrás está cerca de vencer. Los trabajadores de la presa han informado ya de que probablemente mañana los municipios se queden sin agua. Ni para beber, ni para ducharse. Ni para nada.  

La Junta de Comunidades intenta ahora hallar captaciones que puedan enganchar a la red de abastecimiento de los municipios del río Pusa. La amenaza de quedarse sin abastecimiento alcanza en un principio a Santa Ana de Pusa, San Martín de Pusa, Retamoso de la Jara y Villarejo de Montalbán. Pero el presidente de la mancomunidad amplía la repercusión también a Los Navalmorales, el municipio más habitado de la comarca de La Jara con unos 2.200 vecinos. Otras cinco localidades del colectivo (La Pueblanueva, Torrecilla de la Jara, Malpica de Tajo, San Bartolomé de las Abiertas y Espinoso del Rey) disponen, en principio, de fuentes alternativas.

Los técnicos de la Junta de Comunidades aterrizaron el martes en la zona del término municipal de Los Navalmorales para encontrar captaciones de emergencia mediante la construcción de pozos que enganchen a la red; el presidente calcula que la infraestructura puede estar lista en menos de una semana, pero falta encontrar una bolsa de agua adecuada. «Para abastecer al menos unas horas», apunta Lucero como un mal menor a las necesidades diarias. Además, apunta, los técnicos barajan la contratación del servicio de un pozo privado de la zona para abastecer a las poblaciones.

Los pueblos del Pusa prevén quedarse ya mañana sin aguaLos vecinos de esta parte de la comarca de La Jara están acostumbrados a limitar el consumo y a que el abastecimiento se considere no potable, pero la coyuntura actual eleva la gravedad. Tanto, que los ayuntamientos se hacen ya a la idea como «una primera solución» el abastecimiento a los vecinos mediante cisternas o garrafas.

El alcalde de San Martín de Pusa, que ha reclamado como una solución a los problemas recurrentes con el agua la ejecución de un proyecto sobre la captación de agua en la presa redactado hace dos años, tiene en mente a los internos de la residencia de ancianos, que disponen de depósitos propios con miles de litros de agua para estas emergencias. Pero la incertidumbre del tiempo sin abastecimiento de agua asfixia igualmente el servicio en este centro..

«Es angustioso y crítico», reconoce el presidente de la mancomunidad, que volvió el martes a la presa, cuyo aspecto es más desolador del ya exangüe de la semana anterior.