Noelia de la Cruz, portavoz del Gobierno municipal, edil de Obras, Servicios Medioambientales y Transición Ecológica, indicó que el escape de gasoil que ha contaminado al menos un depósito de agua de una vivienda de la Cuesta de la Ciudad es «un problema entre particulares» y subraya que desde el primer instante que se detectó, allá por el mes de agosto, el Ayuntamiento de Toledo se puso «a disposición» de todos los implicados, certeros y potenciales.

Por otro lado, tras una inspección «visual» le han comunicado que el pozo del Salvador «parece que no» está contaminado pero informa que se ha tomado una muestra para su análisis con el fin de asegurarse.

También insta a que todos los vecinos de los alrededores revisen las instalaciones de calefacción y los aljibes.

La edil recuerda que se han extraído 3.070 litros de una mezcla de combustible y agua y señala que sobre este asunto tienen comunicación todas las autoridades competentes (Industria, Medio Ambiente, Confederación Hidrográfica del Tajo…), además de mantenerse también en diálogo permanente con el Arzobispado.

Según sus datos parece que se trata de «una fuga antigua» y a partir de ahora habrá que actuar en función de cómo vaya evolucionando, es decir, a la espera de que el foco principal sea el que se ha visto y que el flujo de combustible en el agua vaya remitiendo.