Con la corbata de color ‘verde Guardia Civil’, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, presidió el acto de homenaje en Toledo con motivo del 175 cumpleaños del nacimiento del Cuerpo. Pasó revista a las diferentes unidades que participaron en el evento y también depositó, junto al delegado del Gobierno en la región, Francisco Tierraseca y el general Manuel Llamas, la corona de flores en honor a los caídos. Lo hizo en el monolito ubicado en la fuente de la conocida como rotonda de ‘Los Luises’, que ahora se llama plaza de la Guardia Civil.
El presidente regional tomó la palabra para agradecer su función de servicio público de la Benemérita. «La Guardia Civil es imprescindible en este país», comentó García-Page, añadiendo que «estáis a la altura de España».
La constitución. Una España, manifestó el presidente, que tiene en sus últimos 40 años, los que ha cumplido la Constitución española, su mejor época, un ejemplo de concordia y evolución. «El avance del país no se podría explicar sin el éxito de la Guardia Civil», apreció el socialista, recalcando que «las fuerzas de seguridad siempre encabezan el ranking de aprecio popular porque proporcionáis la seguridad más básica y, con ella, la libertad», dijo.
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Manifestó, en nombre de los ciudadanos, «el honor y el orgullo» por la Benemérita e indicó que en Castilla-La Mancha ni se quiere ni se necesita una policía autonómica, porque los castellano-manchegos están orgullosos de la Policía y de la Guardia Civil, cuerpo de seguridad pública que, según dijo, «ha cumplido el cometido con el que fue creado el 13 de mayo de 1844».