La Administración del Estado tiene preparadas unas 169 máquinas quitanieves para mantener abiertas las carreteras a pesar del mal tiempo. Este dato y otros del dispositivo frente a las inclemencias climáticas fueron divulgados por el delegado del Gobierno de España en Castilla-La Mancha, Francisco Tierraseca, con motivo de la reunión este martes de la Comisión Regional de Vialidad Invernal. En esta Comisión participaron representantes de la Junta y de los distintos dispositivos estatales (desde  Guardia Civil a Protección Civil, pasando por la UME) implicados en la operatividad de los 4.000 kilómetros de vías estatales existentes en la región, tanto autovías y autopistas como carreteras nacionales .

Junto a estos vehículos, están movilizadas unas 700 personas para despejar vías. También se disponen de unos dos millones de litros de salmuera y otros materiales fundentes para evitar la formación de placas de hielo en la calzada por las bajas temperaturas.

Tierraseca comentó que el operativo contra inclemencias invernales opera en tres niveles. El primero es el de la prevención, con el esparcido de salmuera para evitar placas de hielo. Un segundo implica la intervención de los quitanieves y personal para despejar las vías cuando estén afectadas por nevadas. Esta acción se desarrollará sobre todo en el entorno de las capitales y otras poblaciones de más de 20.000 habitantes, que son las que concentran el mayor número de desplazamientos. Ya en casos más graves, si las vías quedan bloqueadas, se han previsto acciones de ayuda a los automovilistas afectados, en las que intervendrán Guardia Civil, Protección Civil, Cruz Roja y la UME, además de estar ya preparados aparcamientos de emergencia.

Tierraseca también recordó que la Delegación se coordina con las de las siete regiones limítrofes con Castilla-La Mancha para evitar obstáculos circulatorios. Este miércoles tiene prevista una reunión con sus homólogos de Aragón y Valencia para organizar la limpieza de vías en los límites interautonómicos.