El sol y las altas temperaturas propiciaron que la fiesta de ITI se volviera a parecer este año a lo que suele ser: el macrobotellón juvenil más numeroso de los que se celebran en Toledo. Todo ello tras el ‘pinchazo’ de la pasada edición, propiciado por la lluvia. Ayer unos 4.000 jóvenes se citaron en La Peraleda para desarrollar esta fiesta y lo hicieron con una fuerte presencia policial, dado que la Policía Local y Nacional coordinaron un dispositivo para controlar la entrada de equipos de música, así como controles de alcohol y drogas, para evitar el consumo de estas sustancias, así como por cuestiones de seguridad vial.

La fiesta, que tradicionalmente organizaban los alumnos de Ingeniería Industrial de Toledo, se saldó con una persona detenida por tráfico de drogas, un sancionado por conducir bajo los efectos del alcohol y la incautación de un equipo de sonido de grandes decibelios, según los datos ofrecidos a media tarde por fuentes municipales.

Era precisamente a esa hora cuando más público se congregaba en la zona. Las mismas fuentes indicaron que la cita se estaba desarrollando sin incidencias.

El macrobotellón de ITI reúne a 4.000 jóvenes en La Peraleda - Foto: David PérezLa Policía Local y Nacional aplicaron un dispositivo que ya tienen ‘ensayado’. Desde primera hora se dispusieron en las inmediaciones de La Peraleda para controlar el acceso de los vehículos, bien desde el Nudo Norte o bien desde la carretera de la Peraleda.

El objetivo era el de evitar que entrasen con equipos de sonido de grandes decibelios que pudiesen molestar a los vecinos del entorno. También realizaron controles de alcohol y drogas.