El Consorcio limpia y cierra los restos de la Sinagoga de Sofer

J. Monroy / Toledo
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La actuación no ha supuesto gasto alguno, dado que la obra se encontraba en garantía. Se ha procedido al cerramiento y la reposición de la barandilla externa, y se ha limpiado todo el interior, incluidos los aljibes

El Consorcio limpia y cierra los restos de la Sinagoga de Sofer - Foto: Víctor Ballesteros

El Consorcio de Toledo ha procedido ya a la limpieza, cerramiento y acondicionamiento de los restos expuestos frente a la Escuela de Artes y Oficios, entre los que se encuentran los cimientos de la antigua Sinagoga de Sofer, la más antigua de la ciudad. Está pendiente todavía la firma del convenio con el Ayuntamiento, por el que este organismo se hará cargo del mantenimiento y la utilización de los restos, que se tiene que concretar en los próximos días. Pero el Consorcio ya está asumiendo estas funciones, y ha recurrido a la empresa constructora de la nueva plaza, Zym Yáñez, para que haga las mejoras dentro de la garantía de obra.

Durante esta semana, los operarios han tratado de reponer el espacio al estado en el que se hizo la entrega al Ayuntamiento, a mediados de 2010, por lo que lo han limpiado y han reparado los defectos en el cerramiento.

Hace diez días que este diario sacó a la luz el estado de abandono de los restos, conservado bajo unos listones de madera, que permiten el paso de la luz natural, pero también de mucha basura. Ante la falta de limpieza habitual, el entorno, sobre todo los dos grandes aljibes, se encontraba repleto de basura. Pero lo más grave es que el cerramiento estaba dañado, y permitía el paso libre a cualquier persona al hallazgo arqueológico.

La noticia provocó ese mismo día un encuentro al máximo nivel entre el alcalde de la ciudad, Emiliano García-Page, y el gerente del Consorcio, Manuel Santolaya, de la que salió un acuerdo para que este organismo se encargara de la limpieza y el mantenimiento de la plaza y los restos enterrados.

En sólo una semana, el Consorcio ya ha repuesto el estado del espacio. En la parte exterior, ha repuesto la barandilla arrancada y ha arreglado el cerramiento dañado. En el interior, ha procedido a una exhaustiva limpieza, y ha comprobado que funcionan correctamente las bombas de la fuente y la de achique. El mayor problema con el que el Consorcio se ha encontrado ha sido la limpieza de los dos aljibes, que algunos visitantes habían llenado de la gravilla utilizada para rellenar el suelo de las bóvedas vecinas. Ha sido una laboriosa labor, que ha supuesto vaciar los dos espacios y limpiar las piedras.