Marañón señala que donará el edificio a dicha Fundación, junto con un capital para su mantenimiento. La donación incluirá también la parcela correspondiente de jardín y cultivo del olivar, así como bienes muebles. Apunta que persigue de esta forma «que la Fundación sea la titular del Cigarral y que se preserve con los medios necesarios de manera más permanente y no vinculado a los avatares de una familia».En estos momentos la Fundación del Cigarral de Menores está en una fase incipiente. Gregorio Marañón cuenta que ya ha empezado la tramitación que marca la normativa, pero que todavía tienen que ir tomando decisiones más concretas en los próximos meses. Por ejemplo, señala que ha empezado por plantear un patronato cercano, con miembros de la familia. También comenta que todavía tiene que precisar qué capital se dona a la Fundación para poder mantener este edificio histórico. «En los próximos meses iremos dando los siguientes pasos», expone.