No fue el mejor de los partidos pero sí la inyección de moral y de puntos que necesitaba el Villacañas para no perder el tren de la cabeza. El gol agónico de Esteban en el descuento sirvió para romper con la mala racha de más de un mes sin ganar.

El cuadro local volcó el juego hacia la banda izquierda, donde Carballo y Victor creaban ventajas y pasillos claros para llegar al área defendida por Álex, aunque no conseguía crear ocasiones claras. De hecho, el susto para el Villacañas fue mayúsculo cuando José Vega filtró un pase en profundidad para Paco Tomás, quien dribló a Rodri para rematar a placer, pero Juli Cacho consiguió despejar.

No fue hasta la media hora cuando el Villacañas dispuso de una buena opción, con un centro pasado de Mode, desde la banda derecha, que encontró a Carballo solo en el segundo palo. Sin embargo, su remate de cabeza se fue muy alto. Tampoco tuvo éxito Merchán minutos después tras recoger un pase en el área y regatear a Álex Fernández, ya que su pase de la muerte lo despejó Sahuquillo en el momento justo.

El segundo acto empezó con ritmo bajo, y con la incidencia de la lesión de Carballo en el minuto 48. Le sustituyó Álex González, a la postre clave en la victoria. Otro factor diferencial fue la expulsión con roja directa a Manzano en el minuto 65, tras una dura entrada a Fran Simón. El veterano mediocentro también cayó lesionado a raíz de la acción.

A pesar de jugar en superioridad numérica, el Villacañas pudo perder el encuentro en un tiro de Héctor Rubio desde el centro del campo que a punto estuvo de sorprender a Rodri. En la prolongación, Álex González llegó hasta línea de fondo y sirvió un centro perfecto para que Esteban rematara fuerte y preciso y llevara el delirio al público presente en Las Pirámides.