1, 2, 3, 4... y así hasta 17 son las veces que Isabel Fernández se ha subido a un podio este 2021. Desde luego que ha sido un año redondo, tanto como todas esas medallas que vienen a plasmar un esfuerzo encomiable que se ha extendido desde el kárate al para piragüismo y al parapowerlifting.
Ni las había contado. La primera sorprendida fue ella al empezar a recolectar, una a una, y darse cuenta de que había reunido más metales en doce meses que en los cinco años anteriores. «Ni me lo creía, y es algo muy difícil de superar», reconoce con humildad la toledana.
De momento, en el tatami, en la banca o sobre una piragua, Isabel ha demostrado ser garantía de éxito. Ahora promete probar con el boxeo, aunque no garantiza nada, solamente probarlo, aunque, como añade, «lo peor que puede pasar es que me guste», según bromea.
De momento, el kárate sigue siendo la principal fuente de preseas. Es su especialidad, y la capitalina se ha convertido, por derecho propio, en la dominadora de la modalidad en Silla de Ruedas. Este mismo año se ha proclamado de nuevo campeona de Europa y del Mundo. Dos oros a los que hay que unir los tres cosechados en la Liga Nacional RFEK, de dos rondas y de la final. Y, para cerrar el círculo, sus exhibiciones en el Campeonato Internacional Villa de Mora, en el Campeonato de España celebrado en Leganés y en el Regional, disputado en marzo. Total: 8 oros.
Una cifra similar, aunque con diferentes colores, ha sido la cosecha de la toledana en piragüismo. Fue capaz de colgarse dos oros, uno de ellos en el Campeonato de Castilla-La Mancha, en la distancia de 1.000 metros, además de una plata, en el Campeonato de España de Invierno, en 5.000 metros. Por lo demás, se subió al tercer cajón en cinco ocasiones en esta modalidad, dos en el Campeonato de España SprintOlímpico y dos en la Copa de España.
La décimo séptima medalla que resta tiene muchísimo valor. Es la primera en parapowerlifting, disciplina en la que Isabel Fernández tiene depositadas muchas ilusiones, sobre todo por poder allanarle el camino a los Juegos Paralímpicos. Se estrenó en el Campeonato de España, disputado en la localidad de Carranque, con una medalla de oro.
A día de hoy, como ella misma reconoce, el margen de mejora «es enorme». Está por encima de los objetivos marcados, pues llega a levantar 72 kilos. Es un peso similar al que podría alcanzar una medallista de bronce en un Europeo. Pero no quiere adelantar acontecimientos porque 2022 viene precisamente con una cita continental de este deporte. Y con otra de kárate. Además, tampoco quiere aparcar el paracanoe, aunque es verdad que su intención es seleccionar bien las competiciones. Sea como sea, será candidata a brillar. Como este 2021 que se va.