Porque el camino son los «365 días trabajando por la igualdad», la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) conmemoró el 8 de Marzo, Día Internacional de la Mujer, visibilizando las situaciones de discriminación, abuso y violencia que sufren las mujeres de todo el mundo y, sobre todo, exigiendo respuestas y medidas.

Y lo hicieron, los presentes frente a la sede del sindicato, en las palabras de  Montse Pantoja -responsable de Igualdad de CSIF Castilla-La Mancha- y en torno a un manifiesto que exige una igualdad real de género en el Día Internacional de la Mujer, tanto en las administraciones públicas como en las empresas privadas.

Por ello, desde CSIF recuerdan que este año se cumplen 25 años desde la Conferencia Mundial sobre la Mujer, celebrada en Beijing, en la que 189 gobiernos se comprometieron a tomar medidas estratégicas para favorecer el empoderamiento de las mujeres en ámbitos fundamentales que afectan a nuestras vidas, pese a lo que «las reivindicaciones siguen vigentes un cuarto de siglo después».

De ahí que «mujeres de todos los ámbitos, edades, estrato social, convicciones y desde la pluralidad de ideas alcemos la voz por la igualdad y la lucha contra la violencia de género». Una igualdad entre la mujer y el hombre que también debe llevarse «al ámbito laboral y de la conciliación familiar».

Las reivindicaciones de CSIF se centran en «la tolerancia 0 en la violencia contra la mujer»; en la «corresponsabilidad y conciliación familiar» con medidas como los permisos por nacimiento, adopción o acogimiento (paternidad y maternidad) de 20 semanas intransferibles, bolsa de horas, teletrabajo regulado y jornada de 35 horas.

No olvidan reclamar «la eliminación de la brecha salarial», la «prevención laboral con perspectiva de género, y la formación en materia de Igualdad». Todo ello posible, entre otras mediadas, con la creación de «la figura del delegado/a sindical en materia de violencia de género en el sector público».

Porque hoy, apuntó Pantoja, «en España las mujeres continúan en primera línea del debate social» y la violencia de género y las diferentes situaciones de acoso «siguen siendo la expresión más gráfica y cruel de la desigualdad que se ejerce desde hace siglos contra una mujer por el mero hecho de serlo».

No en vano, «la mitad de las trabajadoras, según una encuesta que publicamos el año pasado, reconoce que tienen que aguantar en su trabajo bromas machistas, piropos, mensajes de WhatsApp subidos de tono, miradas o el desdén de sus compañeros».

Sobre las victorias. Eso por no hablar de que las mujeres «seguimos ocupando de forma mayoritaria puestos a tiempo parcial, contratos temporales y nos cuesta más acceder a esferas de poder y responsabilidad, lo que conlleva brecha salarial».

No dudó en recordar que CSIF «ha ganado una importante sentencia contra Zara por discriminar laboralmente a una mujer por acogerse a reducción de jornada (un nuevo ejemplo de la precariedad en el empleo femenino)» y ha destapado la discriminación salarial que sufrían «mujeres del sector hortofrutícola en Almería respecto a sus compañeros».

 Por todo ello, y «después de meses de inacción política por la ausencia de Gobierno», desde la central sindical consideran que «es preciso recuperar el tiempo perdido y que los responsables políticos correspondan nuestras reivindicaciones con medidas concretas».