Que el pasado mes de julio ha sido más caluroso de lo habitual, y eso ya es mucho decir, es algo que ya se puede ratificar con datos. La Delegación territorial de la Aemet de Castilla-La Mancha ha publicado la media de las máximas de estos 31 días y en Talavera se ha llegado a 38,4 grados. Toledo se ha quedado cerca, con una media de máximas de 38, que son 3,4 grados más de los valores habituales para estas fechas en esta ciudad.

“Esta es una provincia de clima continental árido y siempre esperamos veranos muy cálidos”, explica a La Tribuna la delegada de la Aemet en Castilla-La Mancha, Paloma Castro. Pero además esta vez ha habido “un efecto de masa de aire africana que ha estado prácticamente todo el mes sobre nosotros”. Y el remate ha sido la última ola de calor.

Consuélense, 2017 fue peor.

Un mes de julio con una veintena de noches ‘toledanas’

Con todo, recuerda que el verano de 2017 fue peor porque hubo cinco olas de calor y la primera llegó el 15 de junio, mientras que en esta ocasión se ha retrasado hasta finales de julio.

Otras poblaciones toledanas con observatorio de la Aemet han marcado medias de máxima de 36 grados en Madridejos, 35,8 en Quintanar de la Orden y 34,4 en San Pablo de los Montes.

Al frescor de montes y sierra.

Castro cree que en la provincia las zonas más frescas son las que están en la Sierra de San Vicente y en el entorno de los Montes de Toledo, como San Pablo, donde tiene observatorio. Apunta que la clave es la altitud y es que San Pablo de los Montes está a 900 metros y el Real de San Vicente a 750.

Pero además del calor que ha hecho durante el día este mes de julio, por la noche no refrescaba. Las noches tropicales, las que superan los 20 grados de mínima, han sido la mayoría. Se llaman noches tropicales, pero podrían pasar a denominarse ‘noches toledanas’, por lo que cuesta conciliar el sueño y porque en esta tierra han abundado este mes de julio.

Las noches tropicales fueron mayoría.

En la capital se han registrado 22 noches por encima de esos 20 grados (la más cálida fue la del pasado martes 28, con 24,2 grados y la más fresca la del día 3, con 17,6 grados de mínima). La media de las mínimas en Toledo se ha quedado en 21 grados, que son 1,9 más que lo habitual para estas fechas, según lo registrado entre 1981 y 2010.

Talavera se ha quedado en unas 17 noches tropicales, pero rozó los 24,5 grados en la del jueves 30. Sin embargo, la media de sus mínimas no ha llegado a los 20 grados en julio. Quintanar de la Orden supera a ambas ciudades en número de noches tropicales, pues ha llegado a las 24, según indica un gráfico publicado por la Aemet. En el caso de Quintanar la más cálida fue la del 28, con 23,5 grados.

¿Por qué ha habido pocas tormentas?

No ha refrescado de noche, ni tampoco con las tormentas de verano, que no han abundado mucho este mes de julio. Paloma Castro explica que eso se debe a que hacía falta aire frío por encima del aire caliente para que hubiese habido más.