La presencia de patos, ocas y otras aves acuáticas en la rotonda del Polígono a la que han dado nombre no deja de ser polémica. Varias entidades, como la Asociación de Vecinos El Tajo o las protectoras Su Voz y Latido Animal han denunciado que no solo son un peligro para el tráfico, sino que este no es un espacio adecuado para la vida de los animales y han solicitado su traslado a algún espacio cercano acondicionado, para que los niños del barrio puedan, si cabe, disfrutar más de ellos. Las últimas nevadas y bajas temperaturas parecen un punto a favor de estos argumentos. Porque la fuente de la rotonda se ha helado y las aves se han quedado sin tierra por la que dormir o buscar alimentos. Al final le ha tocado Latido Animal efectuar un rescate en colaboración con varios voluntarios.
Hasta la protectora llegó un aviso sobre el estado de los patos. Dos de ellos estaban atrapados en el centro de la fuente, resbalando de continuo. No eran capaces de salir ahí y estaban jugándose una fractura en el hielo. El resto no podía entrar. Lo que Latido Animal desconoce es si tenían comida o no, hay fuentes que apuntan que el Ayuntamiento echo una mano estos días. Pero lo que está claro es que los animales no tenían refugio alguno, ni tierra sobre la que dormir.
La protectora acudió al lugar y, en colaboración con voluntarios del propio barrio, primero pudieron sacar a los patos que se habían quedado atrapados. Después cogieron de la nieve veinte huevos congelados. Despejaron a partir de ahí toda la nieve de alrededor, para que, por lo menos, las aves se pudieran tumbar en tierra, no en la nieve.
Desde Latido Animal también dan las gracias a los bomberos y Policía de la ciudad porque les consta que se personaron para echar una mano a los animales.
Solución. La solución para los patos, insisten desde Latido Animal, tiene que estar en su reubicación. «La rotonda es muy pequeña, hay tráfico continuo, no creo que el Ayuntamiento esté dispuesto a poner vallas, ni refugios, y de hecho cortó los setos que utilizaban ellos porque impedían la visibilidad», apuntan.
Hace tiempo, la Asociación de Vecinos propuso también trasladar a los animales al cercano parque en la parte de atrás del HíperUsera. Dado que son aves surgidas allí por abandono, que no saben ni volar y menos hacer una migración, la protectora apuesta también por una reubicación a un espacio cercano, en algún lugar de Toledo, habilitado por el Ayuntamiento y con casetas, como están en Guadamur.