Puede que usted haya sido uno de los afortunados a los que le haya sonreído la fortuna en alguno de los sorteos de la lotería de Navidad. Si es de los que se queda cada año con las ganas de ese pellizquito tan necesario para tapar agujeros, seguro que le es común escuchar, e incluso de decir, que la salud es lo que importa... Pues este año esa retahíla se ha convertido en más realidad que nunca por gracia de la pandemia y, aunque todos queremos salud, se buscará también que la diosa fortuna nos sonría en el sorteo navideño, que en este 2020, ya toca que pase algo bonito.

Tradicionalmente, la cantinela de los niños de San Ildefonso el 22 de diciembre recuerda que la Navidad ha llegado un año más. Millones de hogares pasan la mañana viendo la televisión a la espera de que salga el premio Gordo y unos pocos afortunados acuden al Palacio Real de Madrid para presenciarlo en vivo y en directo por eso de que, igual, si estás un poco más cerca del bombo, la bolita con el premio tiene un corto camino hasta su bolsillo...

Pero este año, todo va a ser muy diferente. Por lo pronto porque va a ser la primera vez en la Historia que esta tradicional cita navideña se celebre sin público como consecuencia de la pandemia de coronavirus por la que atraviesa el país desde hace ya 10 meses.

Así, en este atípico 2020 no podrá verse  en el patio de butacas del Real a habituales de esta cita como la octogenaria Manoli Sevilla, el obispo Juan, procedente de León, al televisivo Mocito Feliz o a Fernando Vázquez, un niño de San Ildefonso de 78 años que en 1954 cantó el Gordo y desde entonces no se perdía un sorteo.

Por supuesto, no serán los únicos cambios, ya que las medidas de seguridad y de higiene serán casi tan protagonistas como los números y los premios que entran en los bombos. Los niños y niñas de San Ildefonso -que hasta ahora solían ser una treintena y en esta ocasión rondarán los 15- y el resto de asistentes al sorteo deberán acudir con mascarilla de forma obligatoria, y además se realizará un test de antígenos a todos los que estén sobre el escenario.

Loterías y Apuestas del Estado ha estado trabajando con el Teatro Real y la Residencia de San Ildefonso para elaborar un protocolo con medidas de seguridad sanitaria y de prevención para velar por el bienestar de los más pequeños, los trabajadores y los medios de comunicación que asistan al sorteo.

En un comunicado, Loterías detalló que los niños y niñas solo podrán quitarse la mascarilla en el momento en el que canten las bolas de premio y número, y que mantendrán una distancia de seguridad de dos metros entre sus posiciones en el salón.

Los bombos de las bolas estarán más separados de lo habitual para poder garantizar la seguridad de los trabajadores y una mampara transparente se colocará entre los profesionales del sorteo. Además, la mesa presidencial contará este año con cuatro integrantes, en lugar de los cinco habituales, para poder asegurar una distancia mínima de seguridad entre ellos. 

Además de no haber público, el aforo permitido en el teatro para medios de comunicación se reducirá a un 50 por ciento.

«Este año estamos trabajando con más ilusión si cabe para que el Sorteo de la Lotería de Navidad cuente con la participación de los niños y niñas de la Residencia, poniendo muchísimo cariño y dedicación que se siente compartida por todos los agentes implicados», señalaba Charo Rodríguez, directora de la Residencia-Internado de San Ildefonso de Madrid al ser preguntada sobre si este año hay más nervios por la situación particular de la pandemia.

Pese a la COVID-19, pese al miedo a una tercera ola, pese a que las reuniones de familiares y amigos van a ser mínimas si no inexistentes en estos días... pese a todas las contrariedades, los bombos del sorteo ya están desde el pasado martes en el Teatro Real porque esos sí que sí, no pueden faltar. Como es tradición, llegaron a tan magno escenario los dos espectaculares bombos realizados en bronce y latón -el de los números y el de los premios-, que serán los encargados de llevar la suerte a miles de ciudadanos. Hasta entonces, permanecerán custodiados bajo estrictas medidas de seguridad las 24 horas del día y compartirá el recinto algunos días con el montaje de la ópera Don Giovinanni, de Mozart, la más celebrada durante el siglo del Romanticismo.

400.000 eurooooooooooos

Unos datos antes de acabar y de que vaya a echar un vistazo a ver cuánto juega el 2020. Este año han estado disponibles para este sorteo un total de 172 millones de décimos, 172 series de 100.000 números cada una.

La emisión alcanza los 3.440 millones de euros, de los que se reparte un 70 por ciento en premios, con lo que el próximo 22 de diciembre habrá 2.408 millones de euros en premios. Los de importe inferior o igual a 40.000 euros no estarán sujetos al gravamen especial que marca la ley desde 2018. Y, lo más importante, el Gordo estará dotado de 400.000 euros al décimo, el segundo premio será de 125.000 euros al décimo y el tercero repartirá 50.000 euros al décimo. Ahora sí, suerte a todos, pero recuerden que lo importante es la salud.