El primer nacimiento en la provincia no se hizo esperar

Redacción
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Se llama Gonzalo y llegó al mundo a las 1:25 horas en el Mancha Centro, aunque sus padres son de Camuñas. El primer bebé nacido en el Virgen de la Salud es Luca y nació a las 7:33 horas.

Luca nació por cesárea a las 7:33 horas tras un largo parto pero, sin duda, es el mejor regalo de 2020 para sus felices padres. - Foto: Yolanda Lancha

Cualquier maternidad tiene partos y cesáreas a diario, y por eso no es ninguna sorpresa que a algunos bebés les ocurra venir al mundo en la Nochevieja. Parece una escena un tanto trillada sacada de una película, pero a algunos padres les emociona la perspectiva de tener el primer bebé del año. Es por ello que también es una tradición dar a conocer al mundo entero quién ha tenido prisa por venir a este mundo en 2020. 

El primer bebé nacido en Castilla-La Mancha en este recién estrenado año ha sido un niño. Se llama Gonzalo Moreno Álvarez y llegó al mundo a las 1:25 horas de la madrugada en el Hospital General Mancha Centro de Alcázar de San Juan, centro dependiente del Sescam.

 Gonzalo es el segundo hijo de Jesús y Celia, pareja que vive en Camuñas (Toledo). El recién nacido ha pesado 2,224 kilogramos y ha medido 45 centímetros.

Los padres de Gonzalo, el primer bebé de 2020 en la región, son de Camuñas. Los padres de Gonzalo, el primer bebé de 2020 en la región, son de Camuñas.  Sólo dos minutos después de Gonzalo, a las 1:27 horas, nació el segundo bebé de la región en el Hospital Virgen de la Luz de Cuenca. También ha sido un niño, Jorge Molina Escutia, que ha pesado 3,380 kilogramos y ha medido 49 centímetros. Sus padres, Demelsa y Antonio, residen en Villalba de la Sierra (Cuenca).

 El tercer nacimiento en la región tuvo lugar en el Hospital Virgen de la Salud de Toledo a las 7:33 horas. Se llama Luca, es el primer hijo de Estefanía y Fernando, una pareja joven que vive en Recas (Toledo), y ha pesado 2,970 kilogramos. El parto fue largo y finalmente el pequeño Luca vino al mundo por cesárea.

 Pasadas las 9:00 horas vinieron al mundo en el Hospital Universitario de Guadalajara los gemelos Yeiko y Ainhoa. Sus padres, Rodolfo Alejandro y Leomaris, viven en la capital alcarreña y ya tienen a un hijo de cinco años.  

Curioso resulta, ahora que tanto se habla de la España vaciada, que tres de los cuatro niños más madrugadores del año terminen viviendo en pequeñas localidades de Castilla-La Mancha. Ahora que tanto se habla de la España vaciada, estos acontecimientos dan un respiro a un país que lleva décadas con su cifra de nacimientos a la baja. 

Hace escasos días se dio a conocer la última, que reveló que la cifra de nacimientos en Castilla-La Mancha continúa reduciéndose al registrarse durante la primera mitad de 2019 un total de 6.914, lo que supone un 11,1% menos que en el mismo periodo del año pasado, cuando tuvo lugar un total de 7.780 alumbramientos Así lo reflejan los datos provisionales de la Estadística del Movimiento de la Población, publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), relativos a los seis primeros meses de este año, que sitúan a Castilla-La Mancha como la cuarta región con mayor caída de los nacimientos, por detrás de las ciudades autónomas de Melilla (-27,6%) y Ceuta (-22,6%) y en Asturias (-12,0%).