Tercer premio para la hermandad de la Natividad Méntrida

J. Monroy / A. de Paz
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En 2020 se cumplen 750 años de la aparición de la Virgen de la Natividad, por lo que la Junta Directiva buscó el número

Tercer premio para la hermandad de la Natividad Méntrida

Las suerte ha pasado, un tanto de refilón, pero ha pasado por la provincia de Toledo. Más allá del millón de euros que el tercer premio 750 dejó en Toledo capital, Seseña y Méntrida también han conseguido pequeños premios, aunque sea de rebote.

La localidad más afortunada de las dos ha sido Méntrida, donde la Junta Directiva, las camareras y la santera de la hermandad de la Virgen de la Natividad se han repartido al menos cuatro décimos del tercer premio. El 2020 que ahora se inicia se cumple el aniversario de la aparición de la virgen a Pablo Tardío. Ha sido, apuntan fuentes cercanas a los premiados, un premio repartido. Lo que no está claro es si además de estos cuatro décimos, los agraciados compraron alguno más en Toledo.

El número llegó hasta Seseña por máquina. Porque en realidad, la Junta Directiva de la Cofradía encargó el mismo al despacho receptor 77500, ubicado en el número 19 de la calle Talavera de la localidad vitivinícola, tras constatar que se estaba vendiendo en la administración de doña Lola en Toledo. Se ha llevado al menos cuatro décimos del tercer premio, este 750. Eso supone 200.080 euros en premios, (al tercero hay que sumar la terminación en cero, que coincide con el gordo).

Tercer premio para la hermandad de la Natividad MéntridaTercer premio para la hermandad de la Natividad MéntridaAunque el propietario del despacho receptor, Fernando Lozano, no quiso adelantar más que el premio ha recaído en particulares, lo cierto es que desde muy pronto comenzó a conocerse en Méntrida la buena suerte que este aniversario y año jubilar ha traído ya para los mandamases de la cofradía.

El 750 era, como el resto de premios gordos de este sorteo, un número relativamente madrugador, que cantaban los niños de San Ildefonso a las once y diez de la mañana. Le corresponden medio millón de euros a la serie.

Lozano se enteraba de que había dado este premio justo a su llegada de un viaje. Acudía rápidamente a su local de la calle Talavera, aunque no lo va a abrir hasta este lunes por la mañana, día en el que, pasadas las celebraciones, volverá a permanecer abierto de nueve de la mañana a nueve de la noche, como es habitual. Este ha sido su primer gran premio en la Lotería de Navidad, después de un primer premio en 2010 del sorteo del jueves (30.000 euros) y el poco más de un millón que repartió el pasado 20 de abril con un boleto de seis aciertos en la bonoloto.

Un décimo en Seseña. Seis mil euros, o lo que es lo mismo, un décimo de un cinco premio, el 6.293, ha sido el mayor premio para Seseña. Era el segundo de los quintos premios, que cantaban los niños de San Ildefonso poco antes de las diez y media de la mañana y que se ha repartido en diversas localidades de Castilla-La Mancha.

César Puebla regenta desde hace siete años La Llave de la Fortuna, la administración de lotería número dos de Seseña. El establecimiento se encuentra muy próximo a la Casa Consistorial de la localidad sagreña, en la calle Ancha, una de las principales arterias del cuarto municipio más poblado de la provincia. Es la primera vez que este lotero, vecino de Seseña «de siempre», reparte uno de los grandes premios del sorteo extraordinario de Navidad, el más esperado y más jugado. La suerte se ha vendido en este establecimiento del que cuelgan carteles con jugosos premios anteriores en otros sorteos y otras apuestas. Es su primer premio de Lotería de Navidad, más allá de sorteos ordinarios de sábado y jueves, así como bonolotos y euromillón. Es la única administración en el pueblo, además del receptorio del estanco.

Cuenta Puebla que por Seseña pasa mucha gente y no solo se acercan hasta su establecimiento vecinos del lugar. Él desconocía en realidad cuántos premios había dado, podía ser uno, o podía ser una sábana de diez. Poco después de que saliera la bolita, un cliente le había llamado con alegría a la administración para comunicarle que le había tocado el premio del 6.293. Entonces desconocía que era el único en el pueblo. El lotero protege la identidad del afortunado, quien desea seguir en el anonimato. Cada décimo con tal numeración -sugiere una fecha, 6 de febrero de 1993- será gratificado con 6.000 euros.

La administración de Puebla permaneció abierta a lo largo de toda la mañana del domingo, mientras se desarrollaba el sorteo y a la espera del cartel oficial de Loterías anunciando un nuevo premio. Mientras se conocía la noticia en la localidad sagreña, diversos clientes se acercaban para seguir comprando sus participaciones para el próximo sorteo del Niño.