El Ayuntamiento de Burujón publicó el pasado día 6, al poco de conocer el paso al nivel 3 de restricciones, un reproche duro contra el comportamiento de los residentes. «La responsabilidad personal de muchos vecinos de Burujón está dejando mucho que desear en estos momentos en los que deberíamos respetar más y mejor las normas porque se vislumbra un final cercano y un retorno a una relativa normalidad», indica.

«No podemos por menos que escandalizarnos, coincidiendo con la opinión de muchos de vosotros, cuando vemos parques llenos, aglomeraciones innecesarias de personas en espacios públicos, personas sin mascarillas y grupos constituidos por no convivientes en actitudes de normalidad como si nada pasara», apostilla.

«¿Cómo podemos exigir a bares y establecimientos (que están cumpliendo exquisitamente las normas) con una mano y, mientras con la otra, incumplimos flagrantemente las normas más elementales de seguridad sanitaria?», reflexionaba el equipo de Gobierno. A continuación, recalcaba que la crisis generada por la Covid-19 «no está superada». Y añadía: «El virus está presente y hemos vivido recientes desenlaces trágicos que nos tienen que hacer pensar».