Un solitario tanto de Domenech, al cuarto de hora, devolvió al Madridejos a la senda de la derrota en su visita al Pedro Escartín, donde un buen plantado Guadalajara tuvo suficiente con un tanto de su referente ofensivo para llevarse los tres puntos. El tropiezo ante el Dépor coloca a los jugadores de Paco Senda en la penúltima posición del Grupo 18 de Tercera, a un punto de los puestos de salvación, tras 14 jornadas disputadas.

El encuentro comenzó con el conjunto de casa llevando la iniciativa y, fruto de su manejo del balón, generó las primeras llegadas a la portería defendida por Gorka. El primero en avisar iba a ser Módula con un lanzamiento que no encontró su objetivo. El centrocampista argentino fue protagonista poco después, ya que recibió la primera cartulina amarilla del partido al cortar un rápido contragolpe que iniciaba el equipo de Paco Senda.

El Dépor se sentía cómo sobre el rectángulo de juego y no tardaría en ponerlo de manifiesto. Una gran acción por la banda izquierda de Alonso, que filtró el cuero ante la subida de Chema Lorente, terminó con un centro al interior del área de éste que, ante la pasividad de la defensa azulona, no desaprovechó el máximo realizador morado, Domenech, que situó el 1-0 apenas transcurrido un cuarto de hora de partido. Un gol que a la postre, valdría tres puntos.

El chicharro sentó bien a los pupilos de José Luis Acciari, que siguieron gobernando a su antojo a un Madridejos al que le costaba mucho trabajo trenzar alguna jugada que pudiera poner contra las cuerdas a su rival. Los de Paco Senda pudieron incluso marcharse a los vestuarios con una desventaja mayor, ya que primero Fran Santano, con un lanzamiento lejano; y después Domenech, con un remate con la testa que estrelló en la madera, pudieron establecer el 2-0.

En la segunda mitad, los azulones siguieron manteniendo el orden atrás, acumulando efectivos en su propio campo y esperando algún error del Deportivo para igualar a la contra. No se dio tal circunstancia porque los morados supieron en todo momento mantener la calma, no precipitarse y buscar con paciencia la portería visitante. Así transcurrió una segunda mitad sin demasiadas acciones ofensivas a destacar y que terminó con la expulsión, con roja directa, de Pirri por una dura entrada sobre Edgar.