Pablo y Álvaro, campeones regionales de cálculo

La Tribuna
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Los dos niños, alumnos del colegio Virgen de la Caridad de Illescas, se impusieron en el torneo celebrado el pasado sábado en la localidad toledana de Cobisa. Ambos detentan los cetros mundiales y nacionales

Pablo y Álvaro, campeones regionales de cálculo

El pasado sábado 8 de junio, Pablo Quintanero, el más pequeño de los hermanos Quintanero Chacón -de tan sólo 8 años- consiguió resolver los 70 cálculos de su prueba sin ningún error y en tal solo cuatro minutos y 20 segundos. Esta gran hazaña le ha valido el título de campeón de cálculo de la provincia en su categoría, siendo el alumno que mejores resultados obtuvo en esta edición del Campeonato Regional de Cálculo Mental que se celebró en la localidad de Cobisa.

Su hermano mayor, Álvaro -de 9 años-, fue capaz de resolver 66 operaciones en cinco minutos de reloj, un excelente resultado que también le sirvió para ser campeón de su categoría. Ambos hermanos son alumnos del colegio Virgen de la Caridad de Illescas y tienen una gran habilidad con el ábaco y el cálculo mental.

La séptima edición del Campeonato de Cálculo Mental de Toledo se celebró en el Indiana Camp de Cobisa y contó con la participación de más de 100 alumnos. Además de las pruebas de cálculo los participantes participaron en divertidos talleres y actividades de la granja escuela. El final de fiesta fue la entrega de premios a todos los finalistas y ganadores de la edición de 2019.

Los también campeones de España de cálculo, Pablo y Álvaro, ya tienen experiencia en pruebas de este tipo, ya que participaron en el Campeonato Mundial de cálculo mental celebrado en Moscú (Rusia) el pasado verano. Ambos compitieron en una de las ediciones más concurridas, con más 600 alumnos de cinco a 13 años procedentes de 16 países. De los 30 alumnos españoles que se desplazaron a Rusia, estos dos hermanos, fueron los que consiguieron mejores resultados, siendo capaces de realizar los 70 cálculos sin ningún error. El resultado les ha valió el cetro mundial.

En el torneo de Toledo, los participantes no pudieron usar calculadoras ni papel y lápiz.