«Cuando me levanté, me senté en la cama y dije: ¡Madre mía!"

Leticia G. Colao
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Tita García Élez, alcaldesa electa desde el pasado domingo, continúa «en una nube» desde la histórica mayoría que, además de absoluta, le llevará a ser la primera mujer en el despacho de la plaza del Pan

«Cuando me levanté, me senté en la cama y dije: ¡Madre mía!" - Foto: Manu_Reino

Demasiadas emociones en un mismo día llevaron a la que ya es la primera alcaldesa electa de Talavera a no ser consciente de su histórica victoria hasta el día después. Ayer lunes, a las 8 de la mañana, «cuando me desperté con una llamada para darme la enhorabuena, me senté en la cama y dije: ‘Madre mía’, ahora empieza todo», aseguraba aún con risa nerviosa.

La noche había sido larga, la celebración se mezcló con los recuerdos y la emoción «por los que faltan», especialmente su padre, y las horas de sueño, escasas. Tras la fiesta, Tita García Élez llegó a su casa «con una sensación de normalidad relativa, como que no lo tenía asumido», dice, y no fue hasta el día siguiente, con una mezcla de «ilusión y compromiso, pero también de mucha responsabilidad» cuando comenzó a darse cuenta de lo que había conseguido.

Los días de 24 horas se quedan cortos para ella. No contaba con muchos espacios en su agenda como consejera de Fomento pero los últimos días están siendo una auténtica vorágine para la candidata socialista que ha conseguido, ni más ni menos, que una mayoría absoluta de 14 concejales cuando éstas parecían extintas.

Por ello, atiende a La Tribuna desde el vehículo que le trae a Talavera de un nuevo día de trabajo en la consejería, donde reconoce seguir aún «en una nube». Asegura estar «abrumada» con decenas de llamadas y ‘whatsapp’, más de 500 a los que contesta poco a poco, no sólo de compañeros regionales del partido, sino asociaciones y colectivos de Talavera, amigos y familiares, «y todos con un denominador común, que se ha conseguido el cambio».

Entre las felicitaciones más importantes, las que ayer se intercambió con el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, quien ha mejorado sus resultados y gobernará en solitario la próxima legislatura. Tita García Élez le visitó en el Palacio de Fuensalida «para intercambiar opiniones pero sobre todo abrazos», en un encuentro «con emoción contenida» donde volvió a pedirle su apoyo como «aliado» para Talavera.

Lo va a necesitar. Las expectativas han sido muy grandes, más de 18.000 votos y el 46% del apoyo total de los votantes para la primera mujer que será alcaldesa de Talavera. La forma de gestionar, dice, será una de las principales diferencias con respecto a sus antecesores, todos hombres. Según sus palabras, «cuando una mujer está al frente de una institución o de una casa, se gobierna con otra sensibilidad, de forma distinta, lo que nos permite hablar de la igualdad real de la que siempre hemos hablado en el PSOE».

El suyo será el primer ejemplo en el despacho de la plaza del Pan de esa «necesidad de romper techos de cristal también en la política», reto que asume como «un doble orgullo» y con el deber de trasladar la igualdad real también a las administraciones.

 

Justicia y personal. Una vez allí, y dejando de lado las diferencias de género, la futura alcaldesa centrará su labor en conocer la situación del Ayuntamiento, «los temas judicializados, que veremos cómo se encuentran, la falta de personal y los problemas que tienen los diferentes trabajadores en todas las áreas», explicó. Así, la deficiencia en materia de personal, estableciendo un calendario y una organización para su solución, será una de sus grandes prioridades ya que ellos «se tienen que sentir cómodos porque tienen que remar con nosotros».

No estará sola en esta tarea, sino que lo hará apoyándose en el «excelente» equipo con el que llegará al Gobierno municipal, clave en su victoria ya que con ellos «llegó el inicio del cambio». La renovación, el hecho de que muchos de ellos sean «referentes» en sus diferentes labores profesionales y «el sentir que a ellos también les duele Talavera», son los principales puntos a favor del futuro Gobierno local además de la unión sentimental: «Cuando vi que se emocionaban conmigo el domingo, yo decía, he acertado con ellos».

Asegura no haber pensado aún en la conformación de su gobierno y el reparto de delegaciones, ya que todo dependía del número de concejales que les dieran las urnas. Recordando que en su forma de ser no está nunca aventurarse, sí destaca que son personas «con mucho potencial» que aprovechará para que cada área «esté al cien por cien».

En los próximos días irá dando forma a su gobierno de mayoría. Mientras, sigue disfrutando de las sensaciones e imágenes que le dejó la noche electoral, «las miradas, los abrazos y los gritos de ‘alcaldesa, alcaldesa’ que me encogieron el corazón», especialmente cuando venían de sus sobrinos, los que ya presumen de que su tía es la primera alcaldesa de Talavera.